5 efectos negativos de comer pollo frito con frecuencia, según la ciencia
Comer pollo frito con frecuencia puede quitarte años de vida; aumenta en un 39% tu riesgo de diabetes tipo 2 y también puede conducirte a sufrir un ataque cardíaco
El crujiente pollo frito puede ser tan sabroso como poco beneficioso para tu salud. Si eres consumidor frecuente del pollo frito, vale la pena que conozcas algunos efectos negativos de comerlo con frecuencia y optar por disfrutar una pierna de vez en cuando.
1. Elevas tus niveles de colesterol
El pollo empezó a ganar terreno en algunas cadenas de comida rápida presentándose como una opción más saludable a la carne roja. Aunque el pollo generalmente se considera una buena opción de carne nutritiva y baja en grasa, la forma en que se cocina y sirve marca la diferencia.
El pollo con piel y frito contribuye al aumento de tus niveles de colesterol. Si hay demasiado colesterol “malo” (LDL), este se adhiere a las paredes de las arterias, lo que hace que sea más difícil que fluya suficiente sangre a través de ellas. Con el tiempo, esto puede provocar un ataque cardíaco o un derrame cerebral, señala Mayo Clinic.
2. Aumentas el riesgo de diabetes tipo 2
Las personas que comen muchos alimentos fritos pueden tener un mayor riesgo de diabetes tipo 2 y enfermedades cardíacas, según un estudio amplio a largo plazo dirigido por investigadores de Harvard.
Los participantes que comían alimentos fritos de 4 a 6 veces por semana tenían un 39% más de riesgo de diabetes tipo 2, y los que comían alimentos fritos 7 o más veces por semana tenían un 55% más de riesgo, en comparación con los que comían fritos menos de una vez por semana.
3. Aumentas tu riesgo de muerte
Comer pollo frito con frecuencia puede quitarte años de vida. Un estudio publicado por The BMJ encontró que las mujeres que comían una o más porciones de pollo frito al día tenían un 13% más de probabilidades de morir prematuramente por cualquier causa y un 12% más de probabilidades de morir por causas relacionadas con el corazón que las mujeres que no lo hicieron.
4. Favorece tu aumento de peso
Los alimentos fritos normalmente se rebozan en masa o harina antes de freírse y luego absorben grasa, lo que aumenta aún más su contenido calórico en comparación a cuando se hierven, hornean o asan. Por lo que comer mucha comida frita puede llevarte al aumento de peso.
5. Puedes afectar tu estado de ánimo
University Health News publica que si a menudo te sientes aturdido, cansado, con antojos y con dificultad para concentrarse, tu consumo regular de alimentos fritos en aceites vegetales puede ser el culpable.
Además, los alimentos fritos favorecen la inflamación de tu cuerpo. La inflamación puede convertirse en tu enemiga. Harvard Heath explica que muchas enfermedades como el cáncer, las enfermedades cardíacas, la diabetes, la artritis, la depresión y el Alzheimer, se han relacionado con la inflamación crónica.
El pollo frito es una de las comidas favoritas en Estados Unidos, tanto así que en los últimos meses se ha desatado una guerra por el mejor sándwich de pollo frito entre las más grandes cadenas de restaurantes de comida rápida.
“Aunque no se recomienda, comer alimentos fritos menos de dos veces al mes probablemente esté bien, si alguien sigue una dieta saludable”, dice Kelley Bradshaw, dietista principal de servicios de nutrición y bienestar en el Brigham and Women’s Hospital.
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