Por qué no deberías comer mariscos crudos

Comer mariscos crudos es una práctica peligrosa que puede ocasionar enfermedades como las ocasionadas por Vibrio o norovirus; el jugo de limón no es 100% efectivo para matar las bacterias

Las ostras crudas o poco cocidas pueden contener la bacteria Vibrio.

Las ostras crudas o poco cocidas pueden contener la bacteria Vibrio. Crédito: Rene Asmussen | Pexels

El consumo de ostras y mariscos crudos pueden intoxicarte. Si bien comer pescados y mariscos es una práctica común, no es una práctica segura. Los mariscos crudos pueden contener toxinas como el mercurio o bacterias peligrosas que pueden enfermarte gravemente y que pueden destruirse solamente a través de la cocción a la temperatura adecuada.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan no comer pescado, mariscos o alimentos crudos o poco cocidos, ni alimentos que contengan mariscos crudos o poco cocidos, como sashimi, algo de sushi y ceviche.

Esta recomendación de cocinar los mariscos incluye las ostras. Las ostras comen atrayendo agua y materiales en el agua, incluidas bacterias y virus dañinos. Estos virus y bacterias pueden concentrarse en el cuerpo de la ostra e infectar a las personas que las consumen crudas o poco cocidas.

Para evitar infecciones por alimentos, los mariscos deben cocinarse a 145 ° F y los mariscos sobrantes calentarse a 165 ° F.

Vibriosis

Las ostras crudas o poco cocidas pueden contener la bacteria Vibrio. Esta bacteria puede provocar una infección llamada vibriosis.

Algunas ostras se tratan después de su recolección. Este tratamiento puede reducir los niveles de vibriosis en la ostra, pero no elimina todos los gérmenes dañinos.

No hay manera de identificar una ostra con bacterias dañinas. No se ve, huele o sabe diferente a cualquier otra ostra.

Síntomas de vibriosis

La vibriosis puede causar diarrea, cólicos abdominales, náuseas, vómitos, fiebre y escalofríos. Generalmente estos síntomas ocurren dentro de las 24 horas posteriores a la ingestión y duran cerca de 3 días.

Aunque es poco frecuente, las personas con un sistema inmunitario debilitado pueden enfermar gravemente.

Norovirus

Las ostras recolectadas de agua contaminada o frutas y verduras irrigadas con agua contaminada en el campo pueden contaminarse con norovirus.

El norovirus es la principal causa de enfermedad y brotes de alimentos contaminados en los Estados Unidos. Los brotes ocurren durante todo el año, pero son más comunes de noviembre a abril, según señalan los CDC.

Cada año, en promedio en los Estados Unidos, el norovirus causa 900 muertes, principalmente entre adultos de 65 años o más.

La mayoría de los brotes por norovirus ocurren en entornos de servicio de alimentos como restaurantes. Los trabajadores de alimentos infectados son una fuente frecuente de brotes al tocar alimentos listos para comer.

También se pueden contaminar los alimentos al colocarse en superficies con partículas fecales o vómito; otra manera de enfermar es al tocar superficies u objetos contaminados con norovirus y luego llevarse los dedos a la boca.

Síntomas de norovirus

Los síntomas más comunes de norovirus son diarrea, vómito, náuseas y dolor de estómago. Por lo general, los síntomas se presentan entre 12 y 48 horas después de haber estado expuesta al virus. Las personas suelen mejorar entre 1 y 3 días.

Jugo de limón no es suficiente

La salsa picante y el jugo de limón no matan las bacterias como el Vibrio ni tampoco el alcohol. Por ello, para evitar la intoxicación alimentaria, debes cocinar los mariscos.

Cocción segura de mariscos

Antes de cocinar, desecha los mariscos con la cáscara abierta. Hierve hasta que las cáscaras se abran y continúa hirviendo otros 3-5 minutos; o también puedes cocinarlas al vapor por 4 a 9 luego de que el agua ya está humeando. Los CDC recomiendan no comer mariscos que no se abran completamente después de cocinarlos.

Para las ostras sin cáscara, hay varias opciones de cocción: puedes hervirlas durante al menos 3 minutos; freír en aceite durante al menos 3 minutos a 375 ° F; asarlas a 3 pulgadas del fuego durante 3 minutos; u hornearlas a 450 ° F durante 10 minutos.

Algunas ostras se tratan por seguridad después de su recolección. Este tratamiento puede reducir los niveles de vibriosis en la ostra, pero no elimina todos los gérmenes dañinos.

Aun cuando se cocinen los alimentos estos deben manipularse con higiene, ya que pueden contaminarse posteriormente con virus y bacterias.

Te puede interesar:

En esta nota

intoxicaciones alimentarias pescado

Suscribite al boletín de Comida

Recibe gratis novedades sobre alimentación y nutrición para una vida saludable en tu email

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias!

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain