3 aspectos sobre un cuarto cheque de estímulo ante aumento de casos de coronavirus
Un nuevo proyecto de ley de la demócrata Ilhan Omar reabre el debate sobre más ayuda económica directa a los estadounidenses, incluso emitir hasta $1,200 dólares mensuales por adulto, en medio del incremento de los casos de COVID-19
El debate público sobre un cuarto cheque de estímulo comenzó desde finales de marzo pasado, tras aprobarse el Plan de Rescate Estadounidense (ARP) que envió una ayuda de $1,400 dólares por persona, pero una reciente propuesta en la Cámara de Representantes ha reimpulsado la idea de más ayuda directa a estadounidenses.
Sin embargo, el empuje de más ayuda económica directa a familias tiene una ruta complicada en el Congreso, donde al menos 80 representantes y senadores habían expresado su respaldo y enviaron cartas al presidente Joe Biden para apoyar la propuesta.
Fue la representante demócrata Ilhan Omar (Minnesota) quien presentó un proyecto de ley para otorgar pagos mensuales de hasta $1,200 dólares por adulto y $600 dólares por niño, el cual tiene particular impacto en comunidades negras y latinas.
Cuestionado al respecto por este diario, el representante Raúl Ruiz (California), presidente del Caucus Hispano del Congreso, reconoció que aunque haya propuestas sobre la mesa su futuro podría ser complicado, a pesar de al amenaza por el incremento de casos de coronavirus con la variante Delta, que ha retrasado la reapertura completa del país.
El plan de $1,200 dólares
La congresista Omar propuso su plan, conocido como SUPPORT (APOYO), de pagos de estímulo mensuales de hasta $1,200 dólares para adultos y $600 para niños.
“(Se busca) enviar pagos incondicionales… (está) diseñado para construir una economía del siglo XXI que refleje las necesidades diarias de los estadounidenses”, según un comunicado de prensa de la demócrata. “Durante demasiado tiempo hemos priorizado el crecimiento sin fin, mientras millones están sin hogar, hambrientos o sin atención médica”.
Destacó que la pandemia de COVID-19 ha intensificado esas diferencias y, por ello, era el momento para reducir las desigualdades.
Su propuesta busca establecer una nueva Oficina de Programas de Ingresos Garantizados en el Departamento del Tesoro, a fin de supervisar los pagos cuya elegibilidad depende de los ingresos, tomando como base otros apoyos similares, como la Ley CARES o el ARP, que toma en cuenta un ingreso bruto ajustado de $75,000 anuales o menos por persona y $150,000 dólares por pareja.
El plan es apoyado por otros demócratas, como Marie Newman (Illinois).
“Me enorgullece copatrocinar la Ley GPI y la Ley de APOYO para asegurarnos de que estamos teniendo en cuenta la justicia económica”, dijo.
La ruta de aprobación
Cuestionado sobre una posible ruta de aprobación de ese proyecto, el representante Ruiz enfatizó que los actuales proyectos de ayuda a las familias se establecieron en el Plan de Rescate Estadounidense, aunque reconoció que durante la discusión del nuevo paquete económico que se aprobaría bajo el proceso de Reconciliación, algunos congresistas podrían presentar proyectos como un cuarto cheque de estímulo.
“Estamos viendo los principios de la variante Delta… específicamente en lugares donde no se han vacunado”, reconoció, pero señaló que los apoyos por venir están marcados en el ARP. “La ayuda económica… para desarrollar fundamentalmente la seguridad en el trabajo y en las escuelas, para poder abrirlas, están bajo el Plan de Rescate Americano”.
Agregó que los proyectos de infraestructura y de familias que el Congreso aprobaría en las próximas semanas se contemplarían distintas ayudas para niños, trabajadores y sobre seguro médico, pero no un apoyo directo.
Al insistir de alguna presión de otros congresistas para un proyecto adicional de cheque de estímulo, el demócrata reconoció que podría haber alguna discusión.
“Sí, es posible que intenten… todo va a ser bajo la regla del proceso de Reconciliación y quién va a decidir qué se puede poner y qué no se puede poner va a ser la parlamentaria”, señaló.
Biden y expertos
El presidente Biden no se ha pronunciado sobre un posible cuarto cheque de estímulo, pues está enfocado en su proyecto económico multianual sobre inversiones en infraestructura y el Plan para Familias Estadounidenses.
El mandatario ha defendido los apoyos tributarios a las familias, como el Crédito Fiscal por Niño, que otorga hasta $3,600 dólares anuales por menor a las familias con hijos. Su nuevo proyecto es ampliar esa ayuda para los próximos cinco años.
El representante Ruiz reconoció que los demócratas buscarán incluso que sea “de por vida”, pero dependerá de las negociaciones y la decisión de la parlamentaria.
Greg Nasif, director político de Humanity Forward, dijo a CBS News, que las ayudas directas se han vuelto populares y la organización sin fines de lucro en la que colabora apoya los pagos de estímulo recurrentes.
El Tax Policy Center dio a conocer un reporte en marzo que explica cómo la pobreza sería reducida hasta un 6.4 por ciento, pero el impacto sería particularmente importante entre las comunidades negras y latinas.
La pobreza a nivel nacional bajaría del 13.7 por ciento al 6.4 por ciento con un pago directo a los estadounidenses, pero con dos ayudas similares a los $1,400 la tasa sería de 6.6 por ciento.
Los expertos Elaine Maag y Kevin Werner escriben en el reporte “Cómo los pagos en efectivo adicionales reducirían la pobreza” que, en el caso de la comunidad latina, el efecto sería más marcado, ya que la tasa de pobreza bajaría del 13.3 por ciento al 9 por ciento, pero un quinto pago esa cifra se desplomaría al 6.3 por ciento.