Azúcar mascabado: cuánto más sano es que el azúcar blanco

A estas alturas todo se ha dicho sobre las consecuencias de un excesivo consumo de azúcar, es por ello que muchas personas cada día buscan opciones más saludables. Lo primero que es importante decir es que el azúcar viene en muchas formas, normalmente los estantes de las tiendas ofrecen diversas opciones populares: azúcar blanca (granulada), azúcar morena, turbinado, demerara y mascabado. Lo cierto es que existen algunas alternativas que son más saludables que otras, lo cual se relaciona directamente con el tipo de procesamiento. Para mayor contexto: en la elaboración del azúcar blanca o granulada, toda la melaza natural se elimina durante el proceso de refinado. Mientras que a diferencia de los azúcares granulados y morenos, el azúcar moscabado es un azúcar sin refinar o “crudo”, lo que significa que la melaza no se ha eliminado. Por lo tanto es un tipo de azúcar que está hecho solo de caña de azúcar, se calienta el extracto de caña y luego se deja que el líquido se evapore hasta que quede el residuo de azúcar.

Todo el azúcar se elabora con caña de azúcar o remolacha azucarera, de tal modo que los diferentes tipos se elaboran ajustando procesos como la limpieza, cristalización o secado del jugo de las plantas de caña de azúcar o remolacha azucarera. Actualmente que es tan importante tomar el control de nuestra salud y prevenir enfermedades a través de la alimentación, es muy relevante apostar por las alternativas de alimentos más saludables y nutritivas. En lo referente al azúcar, sin lugar a dudas el azúcar moscabado se ha posicionado como uno de los mejores aliados para darle un toque dulce a diferentes platillos y bebidas, sin tantas afectaciones para la salud.

¿Qué es el azúcar moscabado?

El azúcar moscabado también se conoce como azúcar de Barbados, khandsari o khand. Se elabora principalmente en India, Colombia y las Indias Occidentales, siendo India el principal productor a nivel mundial. Es un azúcar de caña crudo, lo cual define su característico color marrón oscuro y fuerte sabor a melaza. Al ser menos procesado que otras variantes en el mercado, se ha convertido en una opción popular más saludable y sobre todo para hornear. Debido a su contenido en melaza, es más pegajoso y ligeramente más grueso, gracias a ello es mucho más húmedo que otros azúcares marrones parcialmente refinados como el azúcar turbinado y dermerara. Es importante destacar que estos azúcares marrones parcialmente refinados no son los mismos que el llamado azúcar moreno que se encuentra comúnmente en los supermercados. El azúcar moreno, es en realidad azúcar blanco altamente refinado al que se le ha agregado melaza para que parezca marrón.

Actualmente en las tiendas se pueden encontrar dos tipos de azúcar moscabado: claro y oscuro. Al claro también se le conoce como ligero y la razón es simple, ya que se le quita gran parte de su melaza. Mientras que el azúcar moscabado “dark” es una versión muy oscura de color casi negro y que se asocia con su contenido en melaza.

¿Por qué el azúcar moscabado es más saludable?

Si bien un excesivo consumo de cualquier tipo de azúcar nunca será un hábito recomendable, el azúcar moscabado se ha posicionado como una buena opción. La principal diferencia entre el azúcar moscabado y el azúcar blanco es que se elaboran a partir de dos fuentes diferentes. El azúcar moscabado es un tipo de azúcar de caña. El azúcar de caña en bruto (moscabado, dermerara, turbinado) se procesa parcialmente por lo que retiene altas proporciones de melaza. Ahora bien, el azúcar de caña sin refinar se llama sucanat. Alternativamente, el azúcar blanco se elabora a partir de la remolacha azucarera y se refina. Además el proceso de conversión de la remolacha azucarera en azúcar blanca puede incluir el uso de floculantes químicos, carbonilla de huesos de animales y blanqueadores. El procesamiento crea pequeños cristales de sacarosa blanca pura.

Lo cierto es que tanto el azúcar de caña como el azúcar blanco refinado son tipos de azúcar que tienen un alto contenido de calorías y hacen que aumenten los niveles de azúcar en la sangre. Lo que sucede con el azúcar moscabado es que es una alternativa más pura y con ello tiene algunos aspectos positivos, sin embargo es importante recordar que si se llama azúcar ¡es azúcar! Y el cuerpo reaccionará como lo hace habitualmente ante la presencia del azúcar. Algunos de las bondades de apostar por el uso de azúcar moscabado, son las siguientes.

– Minerales: El azúcar moscabado a diferencia del azúcar blanco, no pasa por un proceso de centrifugación. Y este es el punto clave por el cual es una variante mucho más rica en ciertos nutrientes, sobre todo en oligoelementos como calcio, manganeso, potasio y magnesio, son sustancias que no se pierden durante la fabricación.

– Antioxidantes: Debido a que el moscabado tiene más melaza que muchos otros tipos de azúcares, conserva algunas de las propiedades antioxidantes de la melaza. Los antioxidantes ayudan a combatir el daño celular causado por los radicales libres. De lo contrario, ese daño puede contribuir al envejecimiento y a enfermedades crónicas como las cardiopatías, diabetes, hipertensión y otras.

– Azúcar agregada: El azúcar moscabado se considera una mejor opción que el azúcar blanco debido a sus propiedades minerales y antioxidantes, pero sigue siendo un azúcar añadido. El cuerpo los digiere más rápidamente que el azúcar natural de las frutas que también tiene fibra y minerales.

Consejos para usar azúcar moscabado:

El azúcar moscabado se puede utilizar de diversas formas, tanto dulces como saladas:

– Es un gran reemplazo de endulcorantes artificiales y azúcar blanca para endulzar el café y té. Lo mejor de todo es que debido a que tiene un sabor más fuerte, es posible que no se necesite usar tanto.

– Al elaborar salsa barbacoa casera, algún aderezo o glaseado, es un gran sustituto del azúcar morena. Aporta textura y gran sabor. 

– Va de maravilla en la elaboración de pan casero, es muy resistente a altas temperaturas y aporta un increíble sabor a melaza. Es un clásico en la preparación de galletas de jengibre y va muy bien en recetas con chocolate. La única advertencia al utilizarla en productos horneados, es que es un tipo de azúcar que tiene más humedad que el azúcar regular y puede hacer que algunas recetas sean demasiado húmedas.

– Es el tipo de azúcar perfecta para endulzar ligeramente la avena.

Es importante ser cautelosos con la ingesta de azúcar en general, recordemos que el consumo regular de azúcares añadidos hace que el nivel de azúcar en sangre aumente una y otra vez. Esto conduce a la resistencia a la insulina, lo que aumenta el riesgo de diversos problemas de salud. La Asociación Estadounidense del Corazón recomienda que las mujeres no consuman más de 100 calorías (6 cucharaditas) de azúcar agregada y que los hombres no más de 150 calorías (9 cucharaditas) de azúcar agregada al día. A modo de conclusión podemos decir, que aunque no todas las presentaciones comerciales de azúcar son iguales y alternativas como el moscabado son versiones más naturales, sigue siendo azúcar. Por lo tanto, es fundamental no excederse y utilizarla con cautela en ocasiones especiales.

Finalmente no es ninguna novedad decir que comer demasiada azúcar aumenta el riesgo de padecer todo tipo de enfermedades degenerativas y es un hábito que acorta significativamente la esperanza de vida. La recomendación es no excederse de los límites establecidos como saludables, apostar por seguir una alimentación natural basada en un abundante consumo de frutas y verduras. Además de evitar los alimentos ultraprocesados y comidas rápidas que suelen estar repletos de diferentes tipos de azúcares artificiales.

—

Te puede interesar: 

• Diabetes: sustitutos de azúcar bajos en calorías recomendados para diabéticos
• Mucho azúcar: los alimentos que no esperabas que tuvieran
• El azúcar de las frutas no causa daños a la salud, según nutricionistas