Comunidad indígena en México vive infierno tras haber ganado premio de lotería

Una de las grandes promesas de campaña que hizo Andrés Manuel López Obrador durante su candidatura a la presidencia de México es que en caso de llegar a convertirse en el máximo mandatario del país, una de las primeras cosas que haría sería vender el avión presidencial que había sido utilizado por los últimos presidentes mexicanos al considerar que este era solamente un mero lujo.

Una vez que asumió su cargo como presidente de México, AMLO cumplió con su promesa de vender el avión presidencial, solo que lo hizo de una forma un tanto atípica pues al no tener ofertas por la aeronave, decidió “rifarlo” en un magno sorteo de la Lotería Nacional para conmemorar el Día de la Independencia de 2020.

Fue así como se emitieron cerca de 6 millones de boletos de lotería con un valor equivalente a $25 dólares, con el fin de recaudar un aproximado a $141 millones (lo que en realidad vale el avión presidencial), cantidad que se dividió en 100 partes iguales, dinero que fue entregado a 100 escuelas y hospitales de todo el país de localidades de bajos recursos.

Ganar la lotería resultó la peor pesadilla

La escuela “José María Morelos y Pavón”, ubicada en el municipio de Ocosingo, Chiapas, fue una de las afortunadas en llevarse uno de los premios del sorteo de lotería de 2020 del avión presidencial.

Las autoridades mexicanas entregaron al gobierno municipal los $945,000 que les correspondían, sin imaginar que este sería el principio de un auténtico calvario.

A poco más de un año de haber salido beneficiados por el sorteo de lotería, decenas de familias buscan ayuda, ya que han tenido que dejar sus hogares por miedos y presiones ejercidas por un grupo criminal de la región, quienes los han exigido les entreguen el dinero obtenido en el sorteo en beneficio de la escuela y comunidad y así ellos puedan adquirir armas de alto calibre.

En declaraciones a medios, Marcelo Santiz, portavoz de las 28 familias indígenas tzeltales que han tenido que desplazarse, contó que el grupo armado de “Los Petules”, asentado entre los poblados de Nacimiento y San Marcos del ejido Carrizal, ha atemorizado y despojado de sus tierras y bienes a habitantes de la región por no entregarles ese dinero.

“El calvario comenzó cuando fuimos notificados de que la escuela preescolar ‘José María Morelos y Pavón’ fue ganadora con un cachito del avión presidencial por la cantidad de 20 millones de pesos ($945,000) el 15 de septiembre del 2020, desde ese momento comenzaron las amenazas y corrupción por parte de Los Petules”, expresó.

Agresiones e intentos de asesinato

Santiz indicó que la violencia ejercida por parte de este grupo criminal hacia la comunidad indígena comenzó en enero de este año e incluso, el 16 de marzo intentaron asesinar a un agente auxiliar para que entregara el premio ganado por el colegio.

Además, en octubre pasado, gente de Los Petules agredieron a mujeres, niños y ancianos de la zona, lo que hizo que muchas familias huyeran a diferentes puntos de la selva para tratar de salvaguardar sus vidas.

“Perdimos más de 250 cabezas de ganado, casas, refrigeradores, cosechas de maíz, frijol y animales de corral y nos quitaron la tarjeta de banco perdiendo derecho a todos los beneficios del Gobierno”, aseguró el portavoz.

El Gobierno y la Fiscalía General de Chiapas ya fueron alertados de la situación; sin embargo las familias denuncian que no hay avances y pidieron la pronta intervención del gobernador, Rutilio Escandón, y del presidente López Obrador.

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