Trump tuvo “peligrosos niveles” de oxígeno cuando enfermó de COVID-19
El expresidente Donald Trump habría minimizado sus síntomas tras contagiarse de COVID-19, cuando en realidad sus niveles de oxígeno en la sangre bajaron a "niveles preocupantes", según su exjefe de Gabinete, Mark Meadows, quien reconoce que el exmandatario dio positivo días antes del debate con el ahora presidente Joe Biden, aunque una segunda prueba resultó negativa
El expresidente Donald Trump quiso mostrarse “fuerte”, casi “invencible” cuando enfermó de COVID-19 en octubre del 2020, pero la realidad es que sus niveles de oxígeno en la sangre alcanzaron niveles preocupantes cuando tuvo que ser hospitalizado.
Así lo revela Mark Meadows, quien fue el último jefe de Gabinete del exmandatario, y el exfuncionario que actualizaba los reportes sobre la salud del republicano.
“Los niveles de oxígeno (de Trump) se habían reducido a alrededor del 86 por ciento y podrían tener una tendencia más baja, un nivel peligrosamente bajo para alguien de su edad”, escribe Meadows en su libro “The Chief’s Chief” (El Jefe del Jefe).
Ese reporte, según un adelanto de The New York Times, contradice al expresidente Trump, quien ha insistido que su enfermedad no era grave en absoluto, incluso cuando días antes de ser positivo a COVID-19 había causado polémica por sugerir a estadounidenses enfrentar la pandemia con “blanqueador”.
Meadows recuerda que funcionarios médicos de la Casa Blanca minimizaron la gravedad del entonces presidente y la negativa de éste de ser transferido al Centro Médico Walter Reed en Maryland, hasta que ya fue inevitable.
“Es mejor que salgas de aquí hoy con tus propias fuerzas, tu propio poder, que tener que llevarte en una camilla en dos días”, le habría dicho Meadows a Trump el 1 de octubre de 2020 para que aceptara dejar la residencia oficial.
¿Trump mintió sobre prueba?
Un reporte de The Guardian indicó que el exjefe de Gabinete había escrito también que tres días del debate presidencial con el presidente Joe Biden, el exmandatario republicano había tenido un resultado positivo a la prueba de COVID-19.
Eso a pesar de que se exigía a los aspirantes presidenciales tener pruebas negativas siete horas antes del encuentro.
Meadows añade que una segunda prueba al exmandatario fue negativa, pero ahora eso han desatado sospechas de que sea real.
“Nada detendría (al expresidente Trump) de acudir a esa cita”, escribió Meadows sobre el debate del 29 de septiembre.
El expresidente confirmó ser positivo a coronavirus el 2 de octubre. El 1 de octubre ya había tenido síntomas.
El expresidente Trump volvió a la Casa Blanca el 5 de octubre, luego de recibir medicamentos experimentales. Se presentó en el balcón de la residencia oficial y se arrancó la mascarilla en señal de triunfo.