Piloto que cayó al vacío desde avión en Carolina del Norte poco antes de aterrizaje habría sufrido un accidente
La avioneta experimentó turbulencias y Charles Hew Crooks, de 23 años, le dijo a su acompañante que no se encontraba bien, poco después se reportó la tragedia
El aeródromo en el Aeropuerto Internacional Raleigh-Durham fue cerrado temporalmente hasta que se asegurara la escena. Crédito: Daniel Slim | AFP / Getty Images
La autopsia al cuerpo del piloto Charles Hew Crooks, que cayó al vacío desde un avión en Carolina del Norte, determinó que el evento fue un accidente.
El pasado 29 de julio, Charles Hew Crooks, de 23 años, volaba como copiloto en una avioneta CASA CN-212 Aviocar de una empresa privada. Desde la rampa trasera del aeroplano, se lanzaban paracaidistas. Sin embargo, el tren de aterrizaje se dañó durante un intento de tomar tierra. En ese momento, se encontraban en el interior el piloto y Crook.
Los viajeros alertaron al control de tráfico aéreo. Poco después, la avioneta experimentó turbulencias y Crooks le dijo al piloto que no se encontraba bien, indica el informe que cita NBC News.
“Estaban volando a aproximadamente 3,500 pies con la rampa trasera abierta para la ventilación. La aeronave se encontró con una turbulencia moderada”, lee el documento. Fue ahí cuando Crooks abrió una ventana de la cabina para ventilar y posiblemente para vomitar.
“Poco después, le dijo al piloto que sentía que iba a vomitar y se disculpó. A continuación, salió de la cabina hacia la rampa trasera abierta; en algún momento, el piloto se dio cuenta de que (su compañero) aparentemente se había caído de la aeronave”, agrega el reporte.
El hombre sufrió múltiples lesiones como resultado de la caída accidental poco antes del aterrizaje. La autopsia concluyó que Crooks no sufría ninguna enfermedad natural significativa ni había consumido alcohol o drogas.
Los datos que maneja la Junta Nacional de Seguridad del Transporte revelaron que Crooks parecía visiblemente alterado cuando le manifestó al piloto que se sentía mal.
El piloto, que no ha sido identificado públicamente, dijo a los investigadores que su compañero intentó agarrarse sin éxito de una barra situada a 6 pies por encima de la rampa.
Unas cinco horas más tarde, el cuerpo fue encontrado en un barrio de Fuquay-Varina, al suroeste de Raleigh. Un residente escuchó un ruido en el patio trasero y se topó con el cadáver.
El padre de Crooks, Hew, declaró al referido medio que su hijo era un instructor de vuelo certificado que había pasado años en entrenamiento para convertirse en piloto.
“Obtuvo su licencia de piloto privado cuando estaba en la universidad”, detalló el progenitor. De acuerdo con Hew, a su hijo le encantaba lo que hacía. “No puedo imaginar lo que ha pasado”, añadió.
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