Tres soldados muertos tras un ataque con drones a base aérea al sur de Rusia
La base se encuentra a 310 millas al noreste de la frontera con Ucrania y el ataque se produce después de que las bombas rusas mataran a 13 personas en Kherson en la víspera de Navidad
El dron fue derribado por las defensas aéreas en el aeródromo de Engels. Crédito: STRINGER/AFP | Getty Images
Tres militares murieron tras un ataque con aviones no tripulados en una base aérea en el sur de Rusia, según reportaron este lunes varios medios.
Según los informes, el dron fue derribado por las defensas aéreas en el aeródromo de Engels el domingo por la noche.
“Un vehículo aéreo no tripulado ucraniano fue derribado a baja altura cuando se acercaba al aeródromo militar de Engels en la región de Saratov”, informó el ministerio ruso según las agencias de noticias.
“Como resultado de la caída de los restos del dron, tres militares rusos del personal técnico que se encontraban en el aeródromo resultaron heridos de muerte”.
El ejército ucraniano no ha comentado sobre el ataque hasta el momento, mientras que el equipo de aviación en la base no resultó dañado, dijo el Ministerio de Defensa ruso.
El gobernador de Saratov, Roman Busargin, expresó sus condolencias a las familias y amigos de los hombres y dijo que “no había absolutamente ninguna amenaza para los residentes” en la ciudad de Engels.
La base se encuentra a 310 millas al noreste de la frontera con Ucrania y se produce después de que las bombas rusas mataran a 13 personas en Kherson en la víspera de Navidad, mientras que tres trabajadores de emergencia murieron limpiando minas terrestres.
La ciudad fue atacada 41 veces durante el día, según Yaroslav Yanushevich, jefe de la administración militar regional de Ucrania. Casas, edificios industriales, instalaciones médicas y bloques de apartamentos fueron atacados.
Las autoridades ahora están pidiendo a la gente que done sangre a las víctimas después de que otras 68 personas resultaron heridas en el bombardeo de la ciudad sureña.
Al publicar imágenes de calles llenas de cuerpos y autos en llamas, el presidente Volodymyr Zelensky acusó a las tropas rusas de “matar por intimidación y placer”.
Al describir a Rusia como un “país terrorista”, agregó: “El mundo debe ver contra qué mal absoluto estamos luchando”.
En un desafiante discurso navideño, prometió que los ucranianos seguirán celebrando las festividades a pesar de enfrentar su décimo mes de guerra.
El mandatario agregó: “Soportemos este invierno porque sabemos por lo que luchamos”.
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