Demandan al condado de Nassau por prohibir a mujeres trans participar en deportes

La participación mujeres transgénero en la categoría femenina en competencias deportivas sigue siendo un tema que divide opiniones a nivel nacional e internacional, pues mientras atletas trans insisten en que se les debe permitir participar, como un derecho, otras posturas se oponen y advierten que en ciertos casos las pondría en ventaja sobre otras competidoras, por lo que apoyan que se les prohíba.

Y esta vez, en medio de crecientes ataques a nivel nacional contra los derechos LGBTQ+, el Condado de Nassau acaba de ser llevado a los tribunales, tras una demanda presentada por la Unión de Libertades Civiles de Nueva York (NYCLU), en la que piden que se ponga freno a la orden ejecutiva emitida el pasado 22 de febrero, que prohíbe a niñas y mujeres transgénero participar en deportes para niñas y mujeres en instalaciones del condado.

Así lo confirmó Gabriella Larios, abogada de la Unión de Libertades Civiles de Nueva York, quien advirtió que la medida promovida por el Condado de Nassau, en Long Island, está a tono como los ataques a los derechos LGBTQ+ y políticas de odio y discriminación contra personas transgénero.

“No toleraremos ese odio aquí en Nueva York. Las personas trans que practican deportes necesitan apoyo y afirmación, no ser un objetivo político”, dijo la defensora, señalando que la orden ejecutiva de Nassau que prohíbe específicamente a niñas y mujeres transgénero participar en deportes femeninos en los que participen sus pares cisgénero, viola la ley, pues la exclusión se basa únicamente en el hecho de que son trans.

“El cínico intento del Condado de Nassau de excluirlas de los espacios públicos es una flagrante violación a las leyes de derechos civiles y humanos de nuestro estado”, recalcó Larios.al tiempo que insistió en que no permitirán que se les quite derechos a las personas trans. “Como prometimos el día que se emitió esta orden ejecutiva, estamos tomando medidas para que los tribunales releguen esta política dañina y transfóbica al basurero de la historia, donde pertenece“.

La demanda fue promovida por Long Island Roller Rebels, una liga recreativa de derby de patines de pista plana para mujeres del condado de Nassau, que acoge la participación de mujeres trans, que debido a la orden ejecutiva tiene prohibido que utilicen las instalaciones, al igual que otros 100 lugares, incluidos campos de juego generales en parques, campos de fútbol, béisbol y fútbol americano, canchas de baloncesto y tenis, piscinas cubiertas y al aire libre y pistas de hielo que tengan que ver con todo tipo de deportes recreativos y competitivos.

“Para cumplir con la orden, estos grupos (y las personas que participan en ellos y los dirigen) se verán obligados a realizar investigaciones invasivas sobre las identidades de género de las mujeres cis y trans por igual, invadir su privacidad y autonomía corporal y expulsar a las personas transgénero”, agregó NYCLU.

Curly Fry, miembro de Roller Rebels, criticó la norma ejecutiva, que calificó como cruel, por envíar además “el peligroso mensaje de que las personas trans no pertenecen” al condado de Nassau.

“Como liga comprometida con construir una comunidad y brindar un espacio seguro para todos, rechazamos esta política, que nos prohíbe el acceso a lugares públicos donde de otro modo jugaríamos y practicaríamos solo porque creemos en la inclusión y nos oponemos a la transfobia”, dijo la deportista. “Esperamos que el tribunal vea esta política como lo que es: transfóbica e injusta, y se asegure de que el condado de Nassau sea un espacio seguro para las personas trans, no binarias y de género expansivo”.

En la demanda interpuesta NYCLU agrega que la política de Nassau viola la Ley de Derechos Humanos y la Ley de Derechos Civiles de Nueva York, que prohíben explícitamente la discriminación basada en la identidad de género tras la aprobación de la Ley de No Discriminación de Expresión de Género (GENDA) de Nueva York.

Proyectos similares que prohíben a jóvenes trans participar en deportes han sido aprobados en 24 estados, algunos de ellos frenados en tribunales.