5 errores que arruinan el puré de papas y cómo resolverlos
Agregar las papas al agua hirviendo es uno de los errores más comunes
Evita trabajar demasiado el puré o quedará una pasta pegajosa. Crédito: Shutterstock
Suave, sedoso y esponjoso es como deseas el puré de papas. Aunque parece una preparación sencilla, hay algunos errores que con frecuencia suelen arruinarla, lo que puede resultar en un puré grumoso, demasiado pegajoso o blando.
1. No eliges las papas correctas
Usa la mitad de papas cerosas, como Yukon Gold, y la mitad de papas con almidón, como Russet e Idaho. Las papas cerosas tienen buen sabor, pero pueden volverse pegajosas si son las únicas papas en el puré. El almidón absorbe la mantequilla y la crema para unas papas con textura esponjosa.
2. Las agregaste al agua hirviendo
Cuando cocines alimentos con almidón como las papas, debes tener cuidado de no cocinar demasiado el exterior. A diferencia de la pasta, las papas deben comenzar en agua fría. Si colocas las papas crudas directamente en una olla con agua hirviendo, es probable que su exterior esté completamente blando para cuando el interior se haya cocinado.
Agrega los trozos de papa a la olla, cúbrelos con agua hasta que estén sumergidos y luego enciende la estufa. Cocínalas a fuego lento para una cocción más uniforme.
3. Sin sal o papas saladas
Las papas son almidonadas y los almidones requieren de sal para saber bien. Pero tampoco te arriesgues demasiado, es mucho más fácil agregar sal que quitarla. Usa aproximadamente una cucharadita de sal por libra de papas.
Si has salado tus papas agrega más líquido, como leche.
4. Lo trabajas demasiado
No trabajes demasiado las papas, incluso las papas con almidón pueden convertirse en una pasta pegajosa si se trabajan en exceso.
Si usas batidora eléctrica, agrega la mantequilla y la leche al inicio y mezcla suavemente, detente cuando las papas estan suaves. También puedes usar un machacador de papas si quieres papas rústicas, en lugar de un puré suave.
5. Agregas la mantequilla y la leche frías
Tu puré quedará tibio o frío si agregas la leche y la mantequilla frías. Calienta la leche y la mantequilla hasta que se derrita antes de incorporarla al puré, además se integrará mejor.
Recalienta el puré en el microondas o en la estufa pero no revuelvas demasiado.
Otras recomendaciones
Recuerda siempre lavar bien tus papas, nadie quiere un puré sabor a tierra. Una papa sucia, desprenderá restos de suciedad que le darán sabor al agua que luego será absorbida.
Para darle más sabor a tus papas agrega algunas ramitas de romero fresco, tomillo o laurel a la leche antes de calentarla.
El mejor puré es el recién hecho. Si lo realizas con anticipación, guarda un poco del líquido de cocción de las papas para suavizarlo; agrega muy lentamente. Otra manera de revivir un puré de papas seco, es agregando un poco más de leche y mantequilla hasta que esté suave y cremoso de nuevo.
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