Vinicius Jr. ataca a La Liga española por pasividad ante el racismo: “Los racistas siguen yendo a los estadios y no hacen nada”
Vinicius Jr fue víctima de fuertes insultos luego de su sustitución en el encuentro ante Valladolid
El extremo brasileño Vinicius Junior denunció este sábado la pasividad de La Liga española tras los insultos recibidos por parte de algunos aficionados presentes en el estadio José Zorrilla, durante el partido entre Real Valladolid y Real Madrid.
A través de sus redes sociales Vinicius Jr. señaló a La Liga como único culpable de que el racismo se repita y no tomen cartas en el asunto.
“Los racistas siguen yendo a los estadios y viendo de cerca al club más grande del mundo y La Liga sigue sin hacer nada…”, aseguró el brasileño.
Posteriormente agregó otro mensaje en la que apuntó a qué de ahora en adelante se centrará en celebrar los triunfos de su equipo, porque al final la culpa es “suya”, terminó ironizando.
“Seguiré con la frente en alto y celebrando mis victorias y las del Madrid. Al final es MI culpa”, añadió.
El momento se produjo cuando el brasileño se dispuso a abandonar el campo en el minuto 88 por Luka Modric. Vinicius salia del campo por detrás de la portería de Courtois cuando Benzema anotó el definitivo 0-2. La celebración del ’20’ hizo estallar a la grada.
Algunos aficionados cargaron contra el brasileño calificándolo como “hijo de puta, cabrón y negro” tal y como se ha podido ver en vídeos difundidos en redes sociales. Vinicius llegó incluso a patear objetos que caían al campo de vuelta a la grada.
El brasileño ya vivió esta situación la temporada pasada en la visita del Real Madrid a Mallorca y en la presente campaña antes del derbi contra el Atlético de Madrid cuando nos 500 aficionados del Atlético que se encontraban en la zona de acceso de jugadores cantaron “¡Eres un mono, Vinicius eres un mono!”.
La Fiscalía de Madrid archivó la investigación abierta por estos cánticos racistas antes del derbi disputado el pasado mes de septiembre porque, aunque los calificó de “desagradables” e “irrespetuosos”, sostuvo que se vertieron en un contexto de “máxima rivalidad”, que solo “duraron unos segundos” y que no constituyen delito.
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