Sospechosos de la brutal golpiza a anciano dueño de Ray’s Candy Store fueron capturados por la policía de Nueva York
Luis Peroza y Gerald Barth fueron arrestados tras la paliza propinada hacia Ray Álvarez, un anciano de 90 años, luego de un intento de robo en su tienda en East Village, Ray's Candy Store
Dos sujetos fueron detenidos tras la brutal paliza e intento de robo propinado a un anciano propietario de Ray’s Candy Shop en East Village, informaron las autoridades el sábado.
Identificados como Luis Peroza, de 39 años de edad y Gerald Barth, de 55 años, fueron capturados luego de la golpiza perpetrada contra Ray Álvarez, de 90 de años, cuyas heridas eran tan graves en ese momento que ahora debe comer con una pajilla, le dijo a New York Post.
La policía cree que Barth y Peroza, perdieron la cabeza en el vecindario y durante sus crímenes incluyeron la tienda ubicada en Avenue A de Álvarez, declararon las fuentes.
Barth, quien ha tenido encuentros con la ley, fue detenido el miércoles por su vinculación con el intento de robo de Álvarez, junto con el robo en otro hecho delictivo.
Peroza fue arrestado y acusado de asalto el viernes, según la policía de Nueva York horas antes de que lo sacaran de la comisaría del distrito 9 localizado en East 5th Street.
El hombre tenía puesto un gorro negro, chaqueta azul oscura y un pantalón negro con rayas rojas y con las manos esposadas tras la espalda, miraba hacia el frente mientras ignoraba las preguntas de los reporteros.
Los delincuentes presuntamente se acercaron a una persona, de 33 años, en la Avenida C después de las 3:30 de la madrugada del martes, y golpearon a la víctima en la cabeza luego de que se resistiera a ser robado, informaron las fuentes. Igualmente, los sospechosos se fueron con las manos vacías.
Después, a las 6:20 de la tarde, Barth aparentemente golpeó a un hombre de 51 años en la cabeza en la Avenida B con un objeto no identificado, probablemente una roca en un calcetín, después de que rechazara darle un cigarrillo, de acuerdo con las fuentes. El sujeto huyó del lugar con el teléfono móvil de la víctima.
Según las fuentes, Barth apuntó con el dedo a Peroza como el cabecilla de los incidentes dados a conocer.
Álvarez fue atacado al azar cerca de las 3:00 de la madrugada del martes por un desconocido que le preguntó si quería comprar un paquete que llevaba.
Cuando el anciano le preguntó que había adentro del paquete, el criminal se la entregó al otro sujeto y lo amenazó de muerte, declaró la policía.
“Tenían refresco. Me querían vender. Dije que no. Uno me golpeó la cabeza y el pecho. Con una mano [el refresco] al otro tipo, ‘Sostenga esto, voy a matar a este tipo'”, recordó Álvarez el jueves, y añadió: “No podía creerlo”.
Álvarez sufrió de fracturas en el rostro, durante la golpiza le dislocaron la mandíbula y solo come por medio de una pajilla. Por otro lado, dijo muy molesto que la paliza no hubiese ocurrido si hubiera más oficiales de policía patrullando el vecindario.
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