“El camino hacia la ciudadanía es duro”: Melania Trump habló de su experiencia como migrante en EE.UU.

La exprimera dama Melania Trump destacó que convertirse en ciudadano estadounidense conlleva una responsabilidad. Significa, dijo, participar activamente en el proceso democrático y proteger la libertad

“El camino hacia la ciudadanía es duro”: Melania Trump habló de su experiencia como migrante en EE.UU.

Melania Trump, exprimera dama de Estados Unidos Crédito: SAUL LOEB | AFP / Getty Images

La exprimera dama de Estados Unidos, Melania Trump, habló de lo difícil que resulta para los migrantes alcanzar la ciudadanía estadounidense debido a lo complicado que es el sistema legal. Su discurso, sin embargo, no pasó por alto, ya que no mencionó las intenciones del expresidente Donald Trump, su esposo, de restringir el ingreso de extranjeros al país.

El camino hacia la ciudadanía es duro”, reconoció Melania durante su participación en la Ceremonia de Naturalización el Día de la Declaración de Independencia, la Constitución y la Declaración de Derechos de Estados Unidos, en los Archivos Nacionales en Washington.

Melania Trump es de origen esloveno y explicó que su propia vivencia le permitió abrir los ojos a las duras realidades de quienes tratan de ser ciudadanos estadounidenses.

“Para mí, alcanzar el hito de la ciudadanía estadounidense marcó el amanecer de la certeza. En ese momento exacto, descarté para siempre la carga relacionada con si podría vivir en los Estados Unidos. Espero que ahora mismo te sientas invadido por sentimientos similares de consuelo. Finalmente pude planificar todos los aspectos de mi vida. Recuerdo haber sentido un tremendo sentido de orgullo y pertenencia después de recitar el Juramento de Lealtad de los Estados Unidos”, declaró.

El sistema estadounidense, una prueba

Recordó, ante 25 inmigrantes a punto de jurar como ciudadanos estadounidenses, que nació y creció en el “pintoresco país” de Eslovenia, donde sus padres le enseñaron la importancia de una sólida ética de trabajo y de perseguir mis sueños. Y resaltó que los valores que le inculcaron a una edad temprana inspiraron su carrera en la moda y el modelaje.

Esas profesiones, expresó, la llevaron a ciudades como París y Milán, que considera hermosas. Dijo que, si bien trabajar internacionalmente tenía sus reglas y regulaciones, no fue hasta que se mudó a la ciudad de Nueva York, en 1996, que el sistema estadounidense “puso a prueba” su determinación.

“A mi llegada, supe inmediatamente que quería hacer de Estados Unidos mi hogar permanente”, narró.

Expresó que, con el objetivo de obtener una visa de trabajador, comenzó a investigar, visitar consulados y embajadas y recopilar los registros requeridos de sus experiencias laborales.

“Rápidamente, mi vida se convirtió en un laberinto de trámites organizativos. La paciencia y la perseverancia se convirtieron en mis compañeros constantes mientras navegaba a través de esta intrincada red, con la que estoy seguro todos pueden identificarse. Aunque me llevó mucho tiempo, mi sueño de convertirme en ciudadano me impulsó a recopilar meticulosamente hasta el último dato necesario, asegurándome de que no se pasara por alto ningún detalle”, manifestó.

Melania Trump: “Duras realidades”

Agregó que su experiencia personal, al atravesar los desafíos del proceso de inmigración, le “abrió los ojos” a las duras realidades que enfrentan las personas que intentan convertirse en ciudadanos estadounidenses.

“Mi experiencia personal al atravesar los desafíos del proceso de inmigración me abrió los ojos a las duras realidades que enfrentan las personas (incluido usted) que intentan convertirse en ciudadanos estadounidenses.

“Y luego, por supuesto, están los matices de la comprensión de las leyes de inmigración de los Estados Unidos y el complejo lenguaje legal que contienen. Yo era muy devota, pero ciertamente no era abogado y, finalmente, resultó fundamental para mí contratar un abogado. Tuve la suerte de hacerlo, ya que finalmente mi viaje se simplificó y me llevó a la meta, como ciudadana naturalizada”, añadió.

La exprimera dama de Estados Unidos destacó que convertirse en ciudadano estadounidense conlleva una responsabilidad. Significa, dijo, participar activamente en el proceso democrático y proteger la libertad. “También significa predicar con el ejemplo y contribuir a nuestra sociedad. Es una experiencia que cambia la vida y requiere tiempo, determinación y, a veces, incluso una fuerza tremenda”, expresó.

A los 25 migrantes, Melania Trump les dijo: “Siéntete orgulloso de ti mismo, mantente firme y aprovecha las oportunidades que se avecinan. Usted es estadounidense: sea un faro de inspiración para sus hijos y para quienes siguen sus pasos. Que su viaje continúe lleno de infinitas posibilidades y que sus contribuciones enriquezcan el tejido de esta gran Nación”.

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