5 tips sucios para revivir el sexo con tu pareja
Olvídate del misionero
Como cualquier otra relación en esta vida, las relaciones sexuales también deben cuidarse y cultivarse para que no se marchiten y brinden placer. Pero aceptémoslo: muchas veces es complejo, con la rutina de los años y las preocupaciones de la vida diaria -dinero, hijos, trabajo, escuela-, mantener viva la pasión en la relación de pareja.
Si es tu caso, aquí tenemos 5 tips sucios que te ayudarán a revivir el sexo con tu pareja y a devolverle a tu alcoba la pasión que un día les hizo sudar y gemir en los brazos del otro.
El cofre del sexo y el placer
En una caja, guarden aceites de masaje, lubricantes de sabores, un par de juguetes sexuales que nunca hayan usado y que quieran probar, una venda para los ojos, unas esposas, en fin, los objetos sexuales que no se han atrevido a usar y que se darán permiso de probar.
Mantenga su cofre en la habitación y úsenlo a la menor provocación.
Al vapor
Pueden hacerlo en casa, en un hotel o en un spa. Dénse una ducha de vapor rodeados de velas, aromas y pétalos de flores. Amablemente ayúdense uno al otro a acariciar sus cuerpos y explorar todos sus rincones. Compartan besos en lugares inesperados o que poco habían tocado. Si quieren tener sexo ahí mismo, no se detengan, pero si prefieren esperar hasta secarse mutuamente y estar en una cama, adelante. Nada más placentero que tener sexo luego de una relajante ducha.
“Hola, buenas noches”
Para muchas parejas, probar un juego de roles funciona muy bien. Tengan una cita en un bar y pretendan no conocerse. Uno de los dos puede acercarse al otro en plan conquistador mientras la otra persona le trata amablemente o con indiferencia. Inventen nombres, ocupaciones, historias, para lograr la sensación de que son dos desconocidos abiertos a un encuentro pasional que sólo durará una noche.
Otros escenarios
La alcoba no tiene que ser el lugar donde siempre ocurra el sexo. Prueben otros lugares de la casa, como la cocina, la sala o el patio trasero si tienen suficiente privacidad. Intenten incluso escenarios fuera de casa, como el auto, la casa de los suegros o el hotel de moda.
Con las debidas precauciones, pueden intentar un “pic nic hot” en el que lleven comida para probar en sus cuerpos vestidos y luego ocultarse en algún lugar del bosque para acariciarse y besarse. Sólo recuerden que tener sexo en espacios públicos puede tener consecuencias con la autoridad, así que reserven el intercourse para un lugar privado. La espera después de una buena sesión de besos y caricias pícaras creará más tensión sexual que podrán liberar a la hora del encuentro.
Esclavos
Jueguen a ser el esclavo sexual del otro. Un esclavo sexual satisface todos los deseos del otro. Claro, nada los obliga a hacer algo que no quieran y el respeto mutuo debe ser fundamental en este juego. Pero esta dinámica puede ayudarles a liberarse de inhibiciones y a cumplir las fantasías del otro en una atmósfera de acuerdo mutuo. Piensen que a uno de ustedes le toca complacer ahora, pero más tarde será el complacido.