Cómo nació la tradición de comer pescado los viernes o el “Fish Friday”
Durante los viernes de Cuaresma los católicos suelen abstenerse de carne; ¿por qué la carne de animales de sangre caliente está fuera de los límites y en su lugar se sacrifica pescados?
El consumo de alimentos ricos en ácidos grasos omega-3, como los que se encuentran en los pescados azules es de gran ayuda para provenir el deterioro cerebral. Crédito: Shutterstock
Abstenerse de comer carne es una tradición católica durante la Cuaresma. Algunos católicos no solo evitan la carne durante cada viernes dentro de los cuarenta días de Cuaresma, sino todos los viernes del año. ¿Y por qué comer pescado los viernes?
El viernes como día de abstención de carne está relacionada con el día en el que Jesús murió. Por lo que para los católicos resulta apropiado abstenerse de derramar (y consumir) sangre.
Los católicos también señalan que el viernes, el sexto día, también fue el día en que Dios creó a los animales, por lo que abstenerse de comer carne es un simbólico “aplazamiento de la ejecución” para las vacas, los cerdos y las ovejas.
¿Por qué sacrificar peces?
Técnicamente, es la carne de animales de sangre caliente la que está fuera de los límites. En cierto sentido, un animal de sangre caliente sacrificó su vida por nosotros, explica a The Salt el profesor Michael Foley autor de ¿Por qué los católicos comen pescado los viernes?.
Los peces son de sangre fría, por lo que se los considera un juego limpio. “A los peces se les había asociado con las fiestas sagradas incluso en tiempos precristianos. Y a medida que se acumulaban los días sin carne en el calendario cristiano medieval, no solo los viernes, sino también los miércoles y sábados, el Adviento y la Cuaresma y otros días sagrados, el hambre por el pescado crecía”, publica NPR.
Además, el pescado era un alimento que una persona de escasos recursos podía adquirir durante el período romano. La carne se consideraba un lujo de clase alta. Por ello, una forma de ayunar y una forma de austeridad era no comer carne.
Al principio, el pescado más consumido era el arenque, durante la época medieval era imprescindible conservar el pescado y se procedía a salarlo, pero tenía un sabor insípido. Posteriormente se puso de moda el bacalao, el cual tenía un mejor sabor cuando estaba curado y duraba más.
Cuando comer pescado se volvió un asunto político
Cuando Enrique VIII ascendió al trono de Inglaterra en 1509, predominaba el consumo de pescado durante todo el año. El rey estaba casado con Catalina de Aragón y pretendía separarse para poder unirse con Ana Bolena.
El Papa se negó a anular el matrimonio entre Enrique VIII y Catalina. Es así como el monarca inglés se separó de la Iglesia Católica Romana, se declaró jefe de la Iglesia de Inglaterra y se divorció para poder casarse con Ana.
El consumo de pescado se convirtió en una declaración política procatólica. Los anglicanos y los simpatizantes del rey se propusieron comer carne los viernes.
Esta situación en Inglaterra dañó tanto a la industria pesquera de Inglaterra que en 1547, el hijo pequeño de Enrique, el rey Eduardo VI restableció los días de ayuno. Algunos anglicanos retomaron la práctica, pero no resultaría lo mismo los protestantes, que eran los más fuertes en Europa continental, según Mentalfloss.
Actualmente la iglesia católica señala que la tradición es abstenerse de comer carne, no necesariamente de comer pescado. El ayuno y la abstinencia se pueden sustituir “en todo o en parte por otras formas de penitencia, sobre todo por obras de caridad y prácticas de piedad”.
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