El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, compartió este miércoles en su cuenta de Twitter, imágenes de dos presuntos pandilleros cuando fueron arrestados por la Policía Nacional en una zona montañosa del pueblo de Chalatenango.

“Capturamos a 2 pandilleros que en su intentó por huir de la #GuerraContraPandillas se instalaron en una montaña de San Francisco Morazán, Chalatenango”, precisó Bukele.

El comunicado por redes detalla que a los presuntos pandilleros se les incautó un fusil, dos pistolas, marihuana y varios celulares. Las fotos muestran el material incautado y a los dos sospechosos tras ser detenidos.

El aviso del presidente además destaca que en una de las fotos se aprecia una copia de la Constitución de la República de El Salvador.

En otras imágenes compartidas desde la cuenta del presidente, Bukele llama entre comillas “angelitos” a un grupo de pandilleros arrestados. Al menos, cuatro de los detenidos que aparecen sin camisa en la foto divulgada tienen tatuajes que hacen alusión al grupo “Barrio 18”.

La Policía Nacional respondió además a las versiones en redes sociales que apuntan a una supuesta captura “injusta” o “equivocada” de un sospechoso identificado como Jonathan Stanley Quintanilla en Atiquizaya, en el departamento de Ahuachapán.

Al sujeto se le vincula con el cobro de extorsiones para la pandilla a la que alegadamente pertenece.

Las autoridades sostienen que oficiales le tomaron fotos a Stanley Quintanilla mientras cobraba por tercera vez la “renta”.

Sin embargo, ante las dudas planteadas sobre la legalidad del arresto, Bukele bajó un poco el tono de su discurso, e indicó, en otra publicación, que, para despejar dudas, existe precisamente el proceso penal o en los tribunales.

“Ejemplo de alguien con cara de bueno que no tiene nada de bueno. Si queremos ganar esta guerra, debemos dejar que la Policía y la Fuerza Armada hagan su trabajo. Eso no quiere decir que no haya errores, en todos los países del mundo los hay. Si no, no existieran los juicios”, lee un comentario junto a las fotos de la intervención policial del sospechoso.

Este miércoles, la Administración de Bukele se atribuyó el arresto de más de 11,000 presuntos pandilleros en 19 días.

El Gobierno del país centroamericano impuso un régimen de excepción que suspende varios de los derechos fundamentales de los ciudadanos en un intento por garantizar la seguridad pública.

Organismos como Human Rights Watch han alertado sobre la posibilidad de que este estado excepcional que se supone se extienda por 30 días abra la puerta a que se cometan violaciones de derechos humanos.