Robos en tiendas en Nueva York están en un máximo histórico; impunidad genera escasez, cierres y desempleo
Con la reforma penal NYC se ha convertido en un paraíso para los ladrones: los robos minoristas en tiendas han alcanzado niveles récord, provocando el cierre de establecimientos. Además ha habido ataques a empleados y propietarios
NYC se ha convertido en un paraíso para los ladrones “de ocasión”: los robos minoristas en tiendas alcanzaron niveles récord por segundo año consecutivo en 2022 y este 2023 sigue con la misma tendencia, provocando escasez de productos y hasta el cierre de establecimientos.
Según un análisis de datos policiales del New York Post la cantidad de quejas por robo en tiendas superó los 63,000 casos el año pasado, un aumento de 45% con respecto a 2021 y de 275% en comparación con mediados de la década de 2000.
“La gente sigue tomando productos y no podemos detenerlas”, dijo un empleado frustrado dentro de un negocio en el Bajo Manhattan que ha sido atacado cientos de veces. “Es un problema con todos los minoristas en el área. En algún momento ni siquiera habrá una tienda”.
Los datos asombrosos refuerzan los temores de los dueños de negocios mientras continúan esperando que el alcalde Eric Adams cumpla su promesa hace dos meses de ayudarlos. Además, no son sólo los robos, sino además los ataques violentos a empleados y propietarios que se han enfrentado a ladrones e indigentes. Pero muchos de los detenidos huyen y, si son atrapados, quedan pronto libres gracias a la reforma penal, se quejan los efectivos NYPD.
Las cifras de robos alcanzaron un máximo de 37,838 en 2019, justo antes de la pandemia, cuando cayeron brevemente debido en parte a que muchos negocios estaban cerrados. Pero a medida que la ciudad intentaba volver a la normalidad post confinamiento la cantidad de robos también volvió a su tendencia anterior e incluso aumentó.
En paralelo NYPD sumó más de 170,000 delitos graves en 2022, la mayor cantidad en los últimos 15 años y un aumento de más del 20% desde 2021.
En las últimas semanas ha seguido la racha de robos, especialmente violentos en tiendas de Nueva York. NYPD ha alertado desde el año pasado por la creciente inseguridad en los negocios y bodegas. Muchos dueños han optado por reducir los horarios y colocar la mercancía bajo llave ante el alza en los robos en tiendas, farmacias y bodegas, incluyendo ataques mortales a empleados y clientes.
En diciembre un joyero anciano recibió una paliza casi mortal cuando dos sujetos entraron a robar en su negocio en Brooklyn. Se llevaron $100,000 dólares en mercancía.
El mes pasado, también en Brooklyn, un bodeguero fue acuchillado y golpeado por una pareja durante el robo de un refresco.
La pandemia, el clima anti policial y la reforma penal han sido identificados como factores que han disparado el crimen en NYC.