Joven mató a una abuela de 78 años con un disparo en la cabeza porque su casa tenía cortinas rojas

El joven Arion James Wagner, de 19 años, enfrenta múltiples cargos por delitos graves, incluido el asesinato de Nora Luna, una mujer de 78 años de origen mexicano, quien recibió un disparo en la cabeza mientras dormía en su sofá en el distrito de Jackson, Míchigan.

Testigos y testimonios policiales revelaron que Wagner estaba enojado porque habían disparado a la casa de su madre y alguien le dijo que el tirador vivía en una casa de cortinas rojas. El hombre, para vengarse, disparó posteriormente a una casa con cortinas rojas, pero que resultó ser de una persona inocente: la de Luna.

El caso tomó un giro aún más oscuro cuando se revelaron detalles de un presunto altercado entre Wagner y su novia, quien estaba embarazada en ese momento. Según el testimonio de la novia, obtenido por el medio local MLive, Wagner la agredió durante un prolongado período de seis horas, golpeándola, estrangulándola y amenazándola con una pistola.

La novia también afirmó que Wagner la obligó a desnudarse y a acostarse boca abajo en la cama, colocándole una almohada en la cabeza y presionando el arma en la parte posterior de su cabeza, amenazando con matarla a ella, a su familia y a su hijo por nacer.

La novia también declaró que descubrieron que estaba embarazada tres días antes del incidente y que posteriormente sufrió un aborto espontáneo varios días después del arresto de Wagner, detalló el medio local.

La casa equivocada

Según el testimonio presentado en el tribunal, después de los disturbios en su casa, Wagner obligó a su novia a conducirlo por la ciudad, y luego lo llevara a la casa de su madre en Martin Luther King Jr. Drive. Una vez allí, vio que la casa de su mamá había sido atacada con disparos.

Fue entonces cuando alguien le dio que el supuesto tirador vivía en una casa de cortinas rojas y disparó varias balas con una pistola desde el auto, según la versión confirmada por MLive.

Una de estas balas alcanzó la casa de Luna, hiriéndola fatalmente mientras dormía en su sofá, aunque investigaciones posteriores determinaron que ni ella ni nadie de su familia estaba relacionado con el ataque a la casa de la madre de Wagner.

La novia dijo que no sabía que él haría eso.

Las investigaciones policiales revelaron que Wagner fue identificado como sospechoso del tiroteo gracias a una denuncia anónima de un agente federal.

Durante la investigación, se encontraron balas y un cargador extendido en el tocador del baño de la casa de la madre de Wagner, así como una pistola negra con múltiples bandas elásticas alrededor del mango, coincidiendo con la descripción proporcionada por la novia de Wagner.

Wagner, quien está detenido sin derecho a fianza, enfrenta cargos que incluyen asesinato, agresión con intención de causar grandes daños corporales y violencia doméstica. Su próxima audiencia está programada para el 27 de febrero.

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