Por qué saltarse comidas antes de la cena de Thanksgiving no es buena idea
Aunque muchos creen que es bueno hacer ayuno para disfrutar las comidas de Thanksgiving, lo ideal es que sí comas antes de tu compromiso
La cena de Thanksgiving es una tradición que reúne a familias y amigos para disfrutar de un banquete lleno de sabores únicos, desde el pavo hasta los postres. Sin embargo, muchas personas creen que llegar con el estómago vacío es la mejor estrategia para comer más durante la comida principal.
Según expertos en nutrición, esta práctica no es del todo recomendada, ya que puede afectar tanto el disfrute de dichos alimentos como tu bienestar en general.
¿Por qué no es recomendable saltarse comidas antes de la cena de Thanksgiving?
Aunque la idea de “ahorrar espacio” en el estómago para la cena de esta festividad puede sonar razonable, dietistas explican que este enfoque suele generar problemas.
1) Hambre extrema y atracones. Cuando llegas a la cena con demasiada hambre, es fácil caer en la tentación de comer rápido y en exceso. Esto no solo te deja con una sensación de incomodidad, sino que también puede provocar indigestión y malestar general. Nicole Rodriguez, dietista radicada en Nueva York, destaca que “privarte de comida durante el día, puede arruinar tu capacidad de disfrutar la cena, llevándote a comer más de lo necesario”.
2) Comidas regulares, clave para el éxito. Elizabeth Shaw, autora del libro “Instant Pot Cookbook for Dummies”, sugiere que comer en horarios habituales es fundamental. “Tu cuerpo agradecerá que lo alimentes a lo largo del día, preparándote mejor para la comida principal”, señala. Mantener niveles estables de energía ayuda a controlar las porciones y a disfrutar mejor de los platillos que realmente amas.
3) El impacto del alcohol con el estómago vacío. Para quienes disfrutan una copa de vino o un cóctel mientras cocinan o socializan, comer algo antes es crucial. El alimento ayuda a metabolizar el alcohol, reduciendo la posibilidad de mareos o malestar antes de que empiece la cena.
Cómo prepararte para disfrutar la cena de Thanksgiving sin excesos
En lugar de ayunar durante el día, los expertos recomiendan planificar tus comidas de forma estratégica. Esto te permitirá disfrutar de tus platillos favoritos sin terminar con molestias digestivas.
1) Ajusta el horario de tus comidas. El momento ideal para comer depende de la hora en que celebres la cena de Acción de Gracias: Si la cena es al mediodía o temprano en la tarde, un desayuno balanceado unas horas antes es clave para evitar llegar con hambre extrema. Si la cena es por la noche, opta por un desayuno completo y un almuerzo ligero, de dos a cuatro horas antes de la comida principal.
2) Qué comer antes de la cena. La clave está en consumir alimentos ricos en proteínas, fibra y grasas saludables. Estas opciones te mantendrán satisfecho y con energía sin sentirte pesado.
Opciones de desayuno:
* Avena o avena nocturna con frutas frescas y frutos secos.
* Un batido con proteína, espinacas y mantequilla de almendra.
* Tostada de aguacate con un huevo cocido.
* Una tortilla de verduras acompañada de pan integral.
Opciones de almuerzo:
* Tostada de pan integral con requesón o queso cottage.
* Wrap de trigo integral con vegetales, garbanzos y aderezo ligero.
* Una taza de sopa de lentejas.
* Sándwich de pavo en pan integral con lechuga y tomate.
Estas comidas simples y equilibradas no solo controlan el hambre, sino que también te ayudan a elegir con más criterio qué comer durante la cena. Como señala Shaw, “al estar satisfecho, es menos probable que piques de forma impulsiva aperitivos que realmente no disfrutas”.
Consejos para disfrutar la cena de Thanksgiving sin culpa
Acción de Gracias es una ocasión para celebrar con seres queridos y disfrutar de la comida que más te gusta. No es un día para obsesionarse con la dieta o contar calorías. Según Rodríguez, “un día de indulgencia no afectará tu salud general”.
Algunos consejos adicionales:
* Sírvete lo que realmente te guste: No te sientas obligado a comer de todo. Elige los platillos que más disfrutas y saborea cada bocado.
* Escucha a tu cuerpo: Come despacio y presta atención a las señales de saciedad.
* Incluye variedad: Un poco de todo, desde vegetales hasta postres, hará que la experiencia sea más placentera.
Recuerda, la verdadera esencia de esta festividad no está solo en la comida, sino en los momentos compartidos y la gratitud. ¡Feliz Thanksgiving!
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