Cuomo cometió “mala praxis médica” en crisis mortal de COVID en Nueva York: informe del Congreso

Siendo gobernador de Nueva York (2011-2021), Andrew Cuomo cometió “mala praxis médica” y subestimó públicamente el número total de muertes relacionadas con COVID en hogares de ancianos en el estado durante el peor período de la pandemia letal en 2020, según un informe de investigación final condenatorio publicado por un panel clave de la Cámara de Representantes en Washington DC.

El panel remitirá a Cuomo al Departamento de Justicia (DOJ) por “declaraciones criminalmente falsas” en el informe de muertes en hogares de ancianos de Nueva York

Cuomo, quien supuestamente aspira a competir en las primarias demócratas por la Alcaldía de Nueva York en 2025, renunció a la gobernación en el verano de 2021, bajo acusaciones de acoso sexual, siendo sustituido por Kathy Hochul, su entonces vicegobernadora, quien pasó a ser la primera mujer en la historia en liderar el poder ejecutivo estatal.

Ahora el informe del “Subcomité Selecto de la Cámara de Representantes sobre la Pandemia de Coronavirus“, liderado por los republicanos, también concluyó que Cuomo “probablemente dio declaraciones falsas” sobre su papel en la toma de decisiones sobre la pandemia, reportó New York Post.

Eso incluye que Cuomo estuvo “directamente involucrado” en el edicto del 25 de marzo de 2020 que ordenaba a los hogares de ancianos admitir a pacientes que se habían recuperado de COVID-19 en hospitales; y luego restó importancia a las muertes de residentes, empleados y visitantes relacionadas con la pandemia en un informe de julio de 2020, encontró el panel de la Cámara.

En otro hallazgo, el informe publicado ayer concluyó que Cuomo “actuó de una manera consistente con un intento de influir inapropiadamente en el testimonio de un testigo y obstruir la investigación del Subcomité Selecto”, en referencia a sus contactos con el ex asesor James Malatras.

El panel también concluyó que “Andrew Cuomo probablemente dio declaraciones falsas al Subcomité Selecto en violación del artículo 18 del Código de los Estados Unidos”, un delito federal que, de probarse, podría resultar en una sentencia de cinco años de prisión. Los hallazgos que se alegan en este informe 2024 incluyen:

-La orden ejecutiva del 25 de marzo de 2020 de la administración Cuomo para admitir o readmitir a pacientes con COVID-19 en recuperación en hogares de ancianos fue una “mala praxis médica”, “antitética a la ciencia conocida” e incompatible con las directrices federales; y la Cámara Ejecutiva “intentó encubrirla”.

-Contrariamente a sus negaciones durante el testimonio en la Cámara, Cuomo y sus principales ayudantes y asesores estuvieron “directamente involucrados” en la orden ejecutiva de marzo de 2020 y la aprobaron, pero luego fue revocada tras la protesta pública.

-Para combatir las críticas al edicto del 25 de marzo de 2020, los funcionarios de la administración Cuomo testificaron que el gobernador ordenó el controvertido informe del Departamento de Salud del estado del 6 de julio de 2020, que fue criticado por subestimar las muertes de residentes de hogares de ancianos por COVID.

-Cuomo participó directamente en la edición de ese informe de julio de 2020 y en la inclusión de personas ajenas a la gobiernación -como el director ejecutivo de Northwell Health, Michael Dowling, y el director ejecutivo del Greater NY Hospital, Kenneth Raske-, para que lo revisaran. En un memorando poco antes de la publicación del informe y obtenido por el panel de la Cámara, Dowling se ofreció a ayudar a “reescribirlo”.

-La cámara ejecutiva de Cuomo decidió eliminar del informe de julio de 2020 los decesos “fuera de las instalaciones” -como los residentes de hogares de ancianos que murieron de COVID después de enfermarse y ser transferidos a hospitales-, reduciendo así drásticamente el número total de muertos.

Tan pronto como en octubre de 2020 Cuomo publicó un polémico libro sobre su supuesta respuesta exitosa a la pandemia de coronavirus, al parecer utilizando para ello a empleados de la gobernación.

A fines de 2020 se supo que Cuomo había limitado sus contactos con el gobierno federal para discutir soluciones, en medio de sus peleas con el entonces polémico mandatario Donald Trump, aún siendo NY de lejos el estado más afectado por contagios, muertes y pérdidas económicas.

En julio de 2021, para el gobierno de Joe Biden el DOJ decidió que no investigaría si los derechos civiles de los residentes en los hogares de ancianos administrados por el gobierno de Nueva York fueron violados por la polémica política de admisión del gobernador demócrata Cuomo relacionada con la pandemia COVID-19.

En 2022, en medio de una batalla local entre demócratas, una auditoría publicada por la contraloría estatal concluyó que el gobierno de Cuomo no dio cuenta pública de la muerte de unos 4,100 residentes de hogares de ancianos en Nueva York durante la pandemia. Según el reporte, el Departamento de Salud del estado (DOH) “engañó al público” intencionalmente sobre la cantidad de decesos en asilos de ancianos por COVID-19 en el año 2020 para ayudar a pulir la reputación del entonces popular gobernador Cuomo.

Se presume que las personas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.