Estudiantes de NYC listos para regreso a clases pero ansiosos por prohibición de celulares
Este jueves se da inicio al nuevo año escolar y los maestros tendrán el difícil reto de que la nueva norma se cumpla al pie de la letra

Estudiantes de NYC listos para regreso a clases pero sin celulares Crédito: Edwin Martínez | Impremedia
Se acabaron las vacaciones. Este jueves 4 de septiembre las más de 1,600 escuelas públicas que integran el sistema educativo de la Gran Manzana, estarán dando la bienvenida a casi 1 millón de estudiantes, quienes esta vez llegarán a las aulas haciendo caras largas, como asegura Sebastián Luján porque los teléfonos celulares ya no podrán estar en las clases.
Y es que a partir de ahora entrará en vigor la prohibición de teléfonos y tabletas inteligentes en los salones de clase ordenado a nivel estatal como parte de la campaña “escuelas sin distracciones” que busca que todos los planteles a lo largo y ancho de en Nueva York mejoren la concentración de los alumnos en sus clases.
“No me gusta saber que vamos a tener que dejar los celulares en un locker porque creo que así seguramente voy a aburrirme más en ciertas clases”, comenta el estudiante de décimo grado de una escuela de Queens, quien sin embargo admite que ese tipo de aparatos genera mucha distracción. “Yo sé que tienen razón en que uno a la escuela debe ir a estudiar, como dice mi mamá, y no a andar metido en el celular, pero sé que esta cosa nueva va a ser muy duro para nosotros. No sé si voy a poder vivir sin mi celular tantas horas”.
El Departamento de Educación de la Gran Manzana (DOE) asegura estar preparado para comenzar a implementar la nueva regulación a nivel general, que en muchos planteles ya es realidad desde años anteriores, pues casi el 50% de las escuelas de los cinco condados niega la entrada a clases a los teléfonos.
El DOE ha dejado claro tanto a estudiantes como a padres de familia, a través de diferentes canales de comunicación, que se tomarán muy en serio la nueva normativa y hacen un llamado a niños y acudientes a que se monten todos al mismo barco a fin de que la nueva normativa se cumpla y contribuya en mejoras académicas, de concentración en las aulas y mejor desempeño académico.
El mandato estatal advierte que la prohibición del uso de dispositivos personales con conexión a internet, como teléfonos inteligentes y relojes inteligentes, durante la jornada escolar se aplicará durante todos los días del año escolar 2025-26, pero aclara que los estudiantes podrán seguir usando sus dispositivos al ir y volver de la escuela. Asimismo, todas las instituciones deben proporcionar opciones de almacenamiento seguro de los aparatos y una forma para que las familias se pongan en contacto con los estudiantes en caso de emergencia.
“Según la política actualizada, la Regulación A-413 del Canciller, los estudiantes no pueden usar dispositivos electrónicos personales con conexión a internet durante la jornada escolar. Esto incluye dispositivos como teléfonos celulares, computadoras portátiles, tabletas y sistemas portátiles de música y entretenimiento”, advirtió el Departamento de Educación, tras recalcar que el objetivo de la novedad crear escuelas libres de distracciones y garantizar entornos de aprendizaje seguros y enfocados.
“A partir del año escolar 2025-26, de acuerdo con la ley del Estado de Nueva York, las escuelas públicas de la Ciudad de Nueva York (NYCPS) actualizarán su política sobre el uso de dispositivos electrónicos personales con conexión a internet, incluidos los teléfonos celulares, en la escuela”, agregó el DOE, que este jueves dará la bienvenida a más de 915,000 estudiantes y 140,000 trabajadores escolares, entre ello unos 75,000 maestros, 3,700 de ellos nuevos.
Padres de familia como Lucas Atehortúa, quien tiene tres hijos adolescentes estudiando en escuelas secundarias del Alto Manhattan, se mostró a favor de la nueva norma, pero advirtió que los profesores necesitarán encontrar maneras creativas para manejar el cambio, especialmente en las primeras semanas. El gran reto es lograr que los alumnos se interesen más por las clases y que pueda manejarse la ansiedad que desde ya anticipa se apoderará de muchos niños.
“Yo apoyo cien por ciento este cambio, pero espero que los profesores y los directores de las escuelas no sean tan ingenuos y piensen que solo es decir ‘no celulares’, y creer que los niños van a estar bien con eso”, dijo el padre de familia. “De seguro va a haber muchos casos de ansiedad y depresión por la falta de los celulares, y no exagero. Los maestros deben estar preparados para esos casos, que me preocupan porque yo nomás he visto en mis hijos no solo pataletas sino escenas duras cuando le pongo horarios con los celulares. Va a ser dura la transición”.
Y desde ya, alumnos que rechazan el mandato, como Alejandro Castillo, advierten que los profesores no la tendrán nada fácil para que los celulares dejen de ser parte del ambiente en los salones de clase.
“Con mis amigos ya tenemos planes para esconderlos y ponerlos en vibrador. Los profesores no se imaginan lo que los celulares son para un joven. Son la vida entera. Quitarnos ese derecho es como si nos arrancaran un brazo”, dijo el adolescente.

Sin embargo, el Departamento de Educación tiene claro que eventualmente habrá casos en los que deberá tomar cartas en el asunto cuando haya estudiantes que se niegan a cumplir a rajatabla la normativa, por lo que advierten que los alumnos que no sigan la regla, se expondrán a sanciones.
“Si un estudiante usa su dispositivo sin permiso durante la jornada escolar, podría estar sujeto a medidas disciplinarias progresivas de acuerdo con las políticas de su escuela y el Código de Disciplina de NYCPS. Esto significa que la escuela implementará una serie de intervenciones y consecuencias progresivas para abordar el comportamiento según la naturaleza y frecuencia de la infracción”, manifestó el DOE. “Ejemplos de intervenciones incluyen reuniones con los padres del estudiante o, si el comportamiento es suficientemente disruptivo, la expulsión del aula”.
Las autoridades escolares hicieron un llamado a los alumnos de las escuelas a que cumplan el mandato y recalcaron que a quienes infrinjan esta política se les podrían incluso confiscar sus dispositivos, pero tener el aparato en clase por si solo, no será causal de suspensión.
Sin embargo, la negativa reiterada a entregar o guardar un dispositivo personal puede resultar en una suspensión. Además, las escuelas no pueden bajar calificaciones de los estudiantes por infringir la política del uso de teléfono celular en clase.
Y aunque el mandato es general, cabe destacar que cada escuela desarrollará su propia política escrita sobre el uso de dispositivos electrónicos, de acuerdo con el Reglamento del Departamento de Educación.
“Estas normas se comunicarán a los padres y estudiantes al inicio del año escolar o al momento de la inscripción. La dirección de las escuelas que comparten un mismo campus se coordinará para desarrollar políticas comunes que deberán seguir todas las escuelas de ese campus”, dijo el DOE.
“Esta política no cubre explícitamente las actividades extraescolares. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada escuela puede optar por restringir aún más el uso de dispositivos en las instalaciones escolares fuera del horario escolar oficial”, advirtió el organismo municipal. “Los padres deben revisar estas políticas detenidamente y asegurarse de que sus hijos comprendan las normas y procedimientos específicos relacionados con los dispositivos electrónicos personales en su escuela, incluyendo dónde y cómo guardarlos de forma segura”.
La gobernadora del Estado, Kathy Hochul, se sumó al llamado y recordó a los estudiantes neoyorquinos y a sus padres que se unan a la política de aprendizaje sin distracciones y guarden sus dispositivos personales con conexión a internet.
“Nuestros niños triunfan cuando aprenden y crecen, no cuando hacen clic y navegan por internet, y por eso las escuelas de Nueva York están preparadas para las restricciones de teléfonos inteligentes entre timbres. Animo a los padres a revisar la política de escuelas sin distracciones del distrito escolar de sus hijos para prepararse para esta importante transición, que sé que traerá resultados increíbles para estudiantes, maestros y familias”, dijo la mandataria estatal.
La Gobernadora recalcó que los celulares estarán prohibidos entre timbre de entrada y timbre de salida durante toda la jornada escolar, incluyendo el horario de clase y otros entornos como los periodos de almuerzo y de estudio.
Asimismo, la mandataria mencionó que cada escuela deberá desarrollar sus propios planes para el almacenamiento de teléfonos inteligentes durante el día, lo que brinda a los administradores y docentes la flexibilidad de hacer lo que mejor se adapte a sus instalaciones y estudiantes, por lo que dará $13.5 millones en fondos para las escuelas que necesiten ayuda para adquirir soluciones de almacenamiento
Beneficios que defienden las escuelas con la prohibición de celulares
- Los teléfonos inteligentes distraen a los estudiantes e inhiben el aprendizaje y la creatividad
- Los entornos sin teléfonos no comprometen la seguridad de los estudiantes.
- Los entornos sin teléfonos promueven la salud mental de estudiantes y docentes.
- La comunicación abierta y la orientación directa para todas las partes interesadas son clave para una implementación exitosa.
- Las escuelas deben abordar las inquietudes de los padres sobre cómo mantenerse en contacto con sus hijos durante el día.
- Una política eficaz contra las distracciones debe centrarse en toda la jornada escolar, en lugar de solo en el tiempo en el aula.
- Las escuelas pueden fortalecer su entorno sin distracciones conectando a más estudiantes con actividades presenciales como clubes, deportes, arte y otros programas.
- Los neoyorquinos pueden visitar la página ny.gov/phonefree para consultar la política de aprendizaje sin distracciones
- También pueden visitar la página del DOE sobre la implementación del programa.
Casos en los que el uso de celulares se permitirá
- Para fines educativos, según las indicaciones de los docentes y la autorización de la dirección de la escuela.
- Para estudiantes con afecciones médicas que requieran el uso de dispositivos electrónicos para su control, como monitores de glucosa para la diabetes. En este caso, los padres deben informar a la escuela y proporcionar la documentación necesaria para garantizar la autorización y el uso adecuados.
- Para servicios de traducción, para ayudar a los estudiantes que necesitan apoyo lingüístico que actualmente no ofrece su escuela.
- Si lo requiere un Programa Educativo Individualizado (IEP) o un Plan 504.
- Para los cuidadores de los estudiantes, según el caso. Un psicólogo, trabajador social o consejero escolar revisará y determinará si se pueden conceder excepciones para un estudiante cuidador que habitualmente es responsable del cuidado y el bienestar de un familiar.
- En situaciones de emergencia individuales, cuando el padre o la madre haya notificado a la dirección escolar sobre la naturaleza específica de la emergencia
- Cuando la ley lo exija. Esto incluye situaciones en las que las leyes federales, estatales o locales exigen el uso de dichos dispositivos para fines específicos