Diabetes: el poder del yogurt griego natural para regular el azúcar en sangre naturalmente
El yogurt griego es una magnífica adición dietética en la dieta de personas diabéticas. Es una de las mejores fuentes de proteínas, vitaminas, minerales, grasas saludables y antioxidantes. Es la colación perfecta, saciante y baja en calorías, ideal para un antojo dulce que no altera la glucosa en sangre
Uno de los temas más candentes del momento es la nutrición, sobre todo la enfocada en encontrar las mejores alternativas de alimentos para mejorar la salud y prevenir enfermedades. El incremento en los casos de diabetes a nivel mundial, ha hecho que cada día sean más las personas interesadas en realizar ajustes dietéticos que beneficien el control de la enfermedad y promuevan el equilibrio en los niveles de azúcar en sangre. Tal es el caso del yogurt griego que se ha posicionado como una de las mejores alternativas en la dieta de personas diabéticas. No solo es uno de los alimentos más saludables del planeta y un básico en toda dieta equilibrada, al ser una de las mejores fuentes de carbohidratos, proteínas, grasas y bacterias buenas. Es la colación perfecta para brindar saciedad sin causar picos de glucosa y un dulce antojo saludable.
En los últimos años el consumo de alimentos fermentados se ha posicionado como uno de los mejores aliados para potenciar la salud, es por ello que todas las tendencias de nutrición y bienestar recomiendan su consumo. Se conoce como un alimento fermentado, a todo aquel que se obtenga del proceso de convertir carbohidratos en alcohol o ácidos orgánicos utilizando microorganismos como mohos, bacterias o levaduras. La categoría es extensa, sin embargo el yogurt es uno de los más famosos y fáciles de integrar en la dieta diaria.
Lo cierto es que existen valiosas bondades que el yogurt griego aporta en la alimentación diabética. En principio se trata de una extraordinaria fuente de probióticos, se trata de microorganismos vivos destinados a mantener o mejorar las bacterias “buenas” y es por ello que se consideran un básico para proteger la microbiota humana. De tal modo que el consumo de yogurt promueve la presencia de bacterias buenas en el intestino, fomenta una mejor absorción de nutrientes y evita que los niveles de azúcar en sangre aumenten de manera dramática. El yogurt, aporta bacterias y enzimas beneficiosas para la flora intestinal y con ello beneficia la salud física, mental, inmunológica y emocional.
Otra de sus grandes cualidades, son sus beneficios para proteger la salud cardiovascular. Es bien sabido que los diabéticos son el doble de propensos a sufrir afecciones como la hipertensión y otras enfermedades cardiovasculares. El yogurt, tiene la capacidad de disminuir los niveles de colesterol sérico y, al mismo tiempo, inhibe la actividad de los vasoconstrictores en el cuerpo que se sabe que causan enfermedades cardiovasculares. Además, el yogurt brilla por su contenido en probióticos y con ello ayuda a estimular la sensibilidad a la insulina, lo que beneficia a las personas con diabetes tipo 2.
Es un maravilloso aliado para promover el control del peso corporal y es un buen complemento para potenciar la pérdida de peso que aumenta el riesgo de diabetes y complicaciones. Al ser bajo en carbohidratos, rico en proteínas, minerales y otros nutrientes beneficia el adelgazamiento mientras aporta una deliciosa saciedad en la dieta. Además de ser perfecto para combatir el apetito y los antojos por alimentos dulces.
El proceso de fermentación por el que pasa el yogurt, mejora y potencia la calidad de sus nutrientes básicos. Es un alimento bajo en calorías, completamente natural y que se distingue por aportar a la dieta proteínas, vitaminas, minerales y numerosos antioxidantes. La combinación de todos estos factores reduce el riesgo de picos de azúcar en la sangre y mejora la resistencia a la insulina. Lo mejor de todo es que todos estos beneficios nutricionales y sus poderosos antioxidantes aportan grandes propiedades antiinflamatorias por muy pocas calorías. Eso sin mencionar que su consumo beneficia muchos otros aspectos de la salud: aumenta la inmunidad, beneficia al sistema digestivo, el estado de ánimo, el rendimiento físico y mental. También, el yogurt es muy rico en calcio, lo cual protege los huesos y con ello disminuye el riesgo de osteoporosis.
El secreto para que los diabéticos puedan disfrutar libremente del yogurt, es apostar por elegir opciones naturales y sin ningún tipo de endulzantes y saborizantes. A continuación algunos aspectos importantes a tener en cuenta:
– Calorías: las calorías totales en el yogurt pueden oscilar entre 100 y 230 o más, según el contenido de grasa y el nivel de azúcar. Evita las variantes que contengan complementos como jarabe de frutas, miel, jaleas, granolas, cereales o cualquier ingrediente extra, suelen aumentar su aporte calórico. En el caso de diabéticos, se aconseja el consumo de alternativas que contengan entre 100 y 150 calorías por porción.
– Carbohidratos: los azúcares de la leche presentes de forma natural (lactosa) contribuyen al recuento de carbohidratos del yogurt, lo que significa que es imposible que el yogurt no contenga carbohidratos. las personas con diabetes, se beneficiarán más de las opciones de yogurt griego y la razón es que durante su preparación se elimina parte del suero, dejando un producto espeso y rico en proteínas con alrededor de un tercio de los carbohidratos en otros tipos de yogurt. También tiene niveles más bajos de lactosa (alrededor del 5%) que otros yogures, lo que hace que sea una alternativa más fácil de digerir.
– Proteínas: un adecuado consumo de proteínas es esencial para todos los músculos y tejidos del cuerpo y además es una fuente importante de energía. La proteína también ayuda a disminuir la velocidad a la que la glucosa ingresa al torrente sanguíneo, lo que ayuda a equilibrar el azúcar en la sangre y al mismo tiempo contribuye a la plenitud. El yogurt griego es generalmente el más rico en proteínas, de hecho algunas marcas contienen hasta 17 gramos. mientras que la mayoría de los yogures convencionales tienen entre 7 y 9 gramos.
– Grasa: la grasa también puede ayudar a ralentizar la absorción de glucosa y aumenta la saciedad. También es esencial para la absorción de vitaminas liposolubles como la vitamina D, que a su vez juega un papel vital en la absorción de calcio. Aunque un yogurt bajo en grasa puede ayudar a reducir la ingesta total de calorías y grasas saturadas, es probable que tenga mucha azúcar agregada; sin lugar a dudas el yogurt griego es la mejor opción para obtener todas esas grasas saludables que se asocian con más beneficios para la salud.
—
Te puede interesar: