Quincy Promes fue condenado a seis años de cárcel por narcotráfico, pero no se presentó al juicio
Promes, de 32 años, fue declarado culpable de haber traficado al menos que 1,363 kilogramos de cocaína junto a otro sujeto, quien también fue condenado
El neerlandés Quincy Promes finalmente fue condenado. De ser un futbolista con una gran proyección por el que el Sevilla llegó a pagar 21 millones de euros ($22.5 millones de dólares) en verano de 2018, Promes pasó a ser un “delincuente” para la opinión pública al confirmarse este miércoles una condena de seis años de prisión por tráfico de drogas.
Promes, de 32 años, fue declarado culpable de haber traficado al menos que 1,363 kilogramos de cocaína junto a otro sujeto, quien también fue condenado. El movimiento habría sido en dos lotes de 650 y 713 kilogramos, transportados desde Brasil a Amberes, en Bélgica, escondidas dentro de un cargamento de sal marina en enero de 2020, según reportaron medios españoles como Mundo Deportivo y Marca, citando a medios de Países Bajos.
Según la misma información, Promes no se habría presentado al juicio al “pensar que es intocable por encontrarse jugando a fútbol en Rusia”, con el Spartak de Moscú.
En ese sentido, todo apunta a que Promes no ingresará en prisión al estar jugando en la liga de fútbol de Rusia, un país sin acuerdo de extradición con Países Bajos. Sin embargo, Promes no podrá volver a pisar Países Bajos ni ningún otro que tenga dicho acuerdo de extradición, como cualquiera de la Unión Europea, por ejemplo.
Si llegase a salir de Rusia, Promes tendría que cumplir esta condena de seis años de cárcel por tráfico de drogas y otra de año y medio que tiene pendiente por un apuñalamiento a su primo.
Hace un par de años, la policía neerlandesa inició una investigación criminal contra Promes después de recibir información que lo vinculaba al tráfico de cocaína, la posesión de teléfonos criptográficos y una inversión de 200,000 euros ($217,712 dólares) en la actividad ilegal. Se colocó un equipo de escucha en el coche del sospechoso y se verificó la veracidad de la información a través de teléfonos incautados a otras personas, donde se encontraron conversaciones que involucraban a los sospechosos.
La droga fue retirada de uno de los contenedores a finales de enero de 2020, mientras que el segundo contenedor pudo ser interceptado a tiempo por la policía belga. La Fiscalía considera que Promes, al tener los recursos para invertir en este negocio ilegal, ocupa un lugar destacado en la jerarquía organizativa del grupo de narcotraficantes.
Cabe destacar que en junio del año pasado, Promes fue condenado a un año y medio de prisión por apuñalar y causar graves lesiones físicas a su primo durante una fiesta familiar en julio de 2020. El futbolista, que negó su implicación en el tráfico de drogas, reside oficialmente en Rusia y juega al fútbol profesional desde 2021.
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