Cómo evitar subir de peso comiendo mantequilla de maní
La mantequilla de maní es un alimento saludable que no tiene por qué ser un obstáculo para tus planes de bajar de peso o mantenerlo bajo control, siempre que evites cometer algunos errores
La mantequilla de maní es rica en grasas saludables y proteína. Crédito: Karolina Grabowska | Pexels
La mantequilla de maní puede formar parte de tu dieta saludable sin ser obstáculo para la pérdida y control de peso. Esta mantequilla es nutritiva y no solo puede darte un impulso de energía, también efectos favorables en tu cuerpo. Para disfrutar de este alimento, aprovechar sus beneficios y evitar subir de peso, debes procurar no cometer algunos errores.
La mantequilla de maní ricos es rica en grasas saludables (insaturadas), proteínas y fibra. Los alimentos con estos nutrientes ayudan a sentirse lleno durante más tiempo, reducir los antojos y el riesgo de comer en exceso. Con la mantequilla de maní puedes obtener bocadillos saciantes que pueden incluirse en la dieta cuando se quiere bajar o evitar subir de peso.
La mantequilla de maní contiene 7.02 gramos de proteína 191 calorías, 1.5 g de fibra y 16 g de grasa por porción de 2 cucharadas (32g). Una porción de dos cucharadas de mantequilla de maní aportan 7.2 g de proteína, según datos de Food Data Central.
¿Qué debes evitar?
1. Comprar mantequilla de maní con alto contenido en sal
Si bien la mantequilla de maní puede ser saludable y beneficiosa, no todas las opciones que encuentras en el supermercado lo son. Idealmente una mantequilla de maní debería de tener idealmente solo cacahuates, en dado caso incluir un poco de sal y nada más. Pero muchas mantequillas, incluso algunas naturales y orgánicas pueden tener altas cantidades de sal y aditivos.
La sal no contiene calorías, pero es un ingrediente que debe limitarse. Es muy fácil exceder el consumo de sodio, lo cual puede provocarte hinchazón y aumento de peso. Otros efectos negativos son dolores de cabeza y alta presión sanguínea. El alto consumo de sal también puede aumentar el riesgo de osteoporosis, cardiopatías y accidentes cerebrovasculares,
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir menos de 2 gramos de sodio al día, el equivalente a 5 gramos de sal. Una cucharadita de sal equivale a 2,300 mg de sodio.
2. Elijes mantequilla de maní reducida en grasa
Encontrarás mantequillas de maní comerciales que no solo tengan mucha sal, sino también azúcar añadido y aceites vegetales parciales hidrogenados.
Elegir una variedades de mantequilla de maní baja en grasa mantequilla generalmente tendrá altas cantidades de azúcar o jarabes, además de ingredientes como concentrado de soja y aceites vegetales hidrogenados para compensar la proteína, sabor y textura.
El alto consumo de azúcar añadido favorece la obesidad y la inflamación. De acuerdo a la Fuente de Nutrición de Harvard el consumo de azúcar no moderado también puede aumentar el riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y otras enfermedades crónicas.
La Asociación Americana del Corazón sugiere a las mujeres limitar el consumo diario a 100 calorías, 6 cucharaditas o 24 gramos de azúcar y a los hombres a no más de 150 calorías, 9 cucharaditas o 36 gramos de azúcar.
3. Comes mantequilla de maní en exceso
Comer mucha mantequilla de maní es fácil si la comes directamente del frasco y puede arruinar tu plan de control de peso. Considera que una porción de cucharadas de mantequilla de maní equivale a 180 calorías. Por lo que si tríplicas el consumo habrás obtenido las calorías de una comida.
4. La usas para preparar bocadillos altamente calóricos
Consumir bocadillos de chocolate y mantequilla de maní puede resultar tentador, pero también rico en calorías. Entre algunas alternativas de snacks saludables puedes untar mantequilla de maní en rebanadas de manzana fresca, en un plátano, a una tostada integral, agregar a tu yogur, avena o granola.
Con moderación, es posible disfrutar de la mantequilla de maní y sus beneficios sin subir de peso.
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