Guerra en Nueva York: cuatro baleados por día y 44% más crimen, pese a refuerzo policial del alcalde Adams
Aunque los homicidios y las violaciones bajaron en marzo en NYC, las balaceras, las agresiones graves, los robos con allanamiento de morada y de automóviles, los hurtos mayores y los delitos motivados por el odio se han disparado
Al cierre de marzo, 2022 sigue siendo un año violento en Nueva York, pese a las medidas de refuerzo de seguridad anunciadas por el alcalde Eric Adams en las calles y el Metro, en su primer trimestre como jefe municipal.
Los delitos graves y los tiroteos no han mostrado signos de desaceleración: en marzo hubo un aumento del 37% en los delitos graves en toda la ciudad y 44% al cierre del primer trimestre, según los datos de la policía de Nueva York presentados ayer. La preocupación está latente, porque tradicionalmente esa tendencia sube más hacia el verano.
Los incidentes de tiroteos aumentaron 16.2% en marzo y, hasta la fecha, NYPD registró 332 víctimas de violencia armada en 2022, un aumento de 14.5% en comparación con el mismo período en 2021 y una tasa promedio de casi cuatro baleados por día.
En los primeros 100 días del gobierno del alcalde Adams, ex capitán NYPD, su política de mano dura con el crimen ha promocionado la creación de una nueva unidad anti-armas y el regreso a la vigilancia bajo la llamada política de “ventanas rotas”, pero hasta ahora, las controvertidas iniciativas han hecho poco para detener el crimen en general, resumió New York Post.
Entre constantes reportes de anarquía, violencia callejera y en el Metro, y víctimas de balas perdidas, la noticia positiva es que tanto los homicidios como las violaciones cayeron 15.8 % y 4.3% respectivamente en marzo en comparación con 2021. Pero las balaceras, los robos, las agresiones graves, los robos con allanamiento de morada y de automóviles, los hurtos mayores y los delitos motivados por el odio se han disparado frente al año pasado.
“Necesitamos ayuda del sistema de justicia penal y de todos los que viven, trabajan o visitan nuestra gran ciudad. Cualquier cantidad de crimen y desorden es inaceptable”
Keechant Sewell, comisionada NYPD
¿Cómo se explica que los homicidios han bajado mientras que los tiroteos aumentan? “Eso es algo con lo que los expertos en violencia armada y los sociólogos todavía están lidiando. Algunas personas se preguntan si las mejoras en la atención médica juegan un papel, si los hospitales salvan a más víctimas de disparos que antes. Pero no estamos seguros. En general, es difícil encontrar explicaciones para las fluctuaciones delictivas a corto plazo. Hay muchos factores, incluida la coincidencia”, comentó Troy Closson, experto en data criminal de The New York Times.
“Nuestra policía necesita más ayuda”, dijo ayer la comisionada Keechant Sewell, durante la primera conferencia de prensa sobre estadísticas criminales realizada desde que Adams asumió el cargo y sólo la segunda vez que ella informa a los periodistas en la sede de NYPD.
“Necesitamos ayuda de todos los rincones del sistema de justicia penal y de todos los que viven, trabajan o visitan nuestra gran ciudad. Cualquier cantidad de crimen y desorden es inaceptable”, reiteró Sewell, cuyo nombramiento hizo historia: es la primera vez que la policía de Nueva York -la más grande del país- está liderada por una mujer y además una persona afroamericana y no salida de NYPD.
La ola de violencia armada que vive la ciudad involucra a pistoleros menores y adultos, hombres y mujeres, y víctimas de todas las edades. Luego del auge en 2020 y 2021 particularmente entre jóvenes miembros y/o víctimas de pandillas, el 2022 sigue con la misma tendencia, poniendo un gran reto al nuevo alcalde Adams, quien ha encontrado obstáculos dentro de su propio partido demócrata para enfrentar la crisis.
En su visita en febrero a NYC tras el asesinato de dos jóvenes policías hispanos, el presidente Joe Biden sí respaldó el plan del alcalde Adams para poner freno a la delincuencia y la violencia armada. También dio a conocer una iniciativa nacional contra el tráfico de armas ilegales.