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Padre e hijo acusados de homicidio afuera de lavandería en Nueva York

Un padre y su hijo fueron acusados por la muerte de un joven de 26 años baleado en el estacionamiento de una lavandería en NYC

NYPD en El Bronx/Archivo.

NYPD en El Bronx/Archivo. Crédito: Edwin Martínez | Impremedia

Norman Moore, padre de 64 años, y su hijo Devonte Moore (24) fueron arrestados como sospechosos de la muerte de Fareed Adeyi, joven baleado en el estacionamiento de una lavandería en El Bronx (NYC).

El padre presuntamente condujo a su hijo pistolero hacia y desde la escena del crimen, informaron las autoridades el miércoles. Adeyi tenía 26 años y fue ultimado en el estacionamiento de “Laundrybee 24/7”, cerca de White Plains Road y Rosewood St. en Williamsbridge, alrededor de las 6:40 p.m. del 7 de octubre, según la Policía de Nueva York.

Los paramédicos lo llevaron al Jacobi Medical Center, donde falleció. “Recibió un disparo en el pecho… Estaba sentado en el asiento del conductor”, declaró un testigo en el momento del tiroteo.

Tanto el padre como el hijo han sido acusados ​​de homicidio y posesión ilegal de armas. “Sólo espero que se haga justicia”, declaró al Daily News una hermana de la víctima, quien prefirió no ser identificada. “(Adeyi) no merecía morir. No merecía ir por ese camino. Nunca tuvo esposa ni hijos. Nunca tuvo la oportunidad de hacer nada”, agregó. “Mucha gente lo quería”.

El funeral de Adeyi se celebró el 11 de octubre. Era el menor de seis hermanos. La víctima y el pistolero se conocían, según fuentes policiales, que no han revelado públicamente el motivo del crimen. El padre tenía cuatro arrestos previos entre 1994 y 200, por allanamiento ilegal, falsificación, posesión de un instrumento falsificado y robo. Todos los cargos son meras acusaciones y se presume que las personas procesadas son inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad en un tribunal.

NYPD celebró una reducción del 23% en los tiroteos este año, de 649 a 500 hasta el 3 de agosto. Los homicidios también disminuyeron 25%, de 241 (2024) a 179 a ese momento en 2025. Sin embargo, la violencia callejera con golpes y armas de fuego y blancas es constante en Nueva York, incluyendo ataques a a agentes de NYPD. Algunas víctimas son alcanzadas al azar. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con batallas entre pandilleros por el territorio, y los sospechosos a veces se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales

Hay víctimas de todas las edades. La semana pasada un adolescente de 18 años recibió un disparo mortal en la cabeza dentro de una vivienda en Queens (NYC). Además un menor dominicano de 17 años falleció baleado en Long Island (NY) y un preso hispano le disparó a otro durante un traslado penitenciario, a pesar de las estrictas medidas de seguridad.

A principios de este mes tres hombres murieron baleados en la cabeza en un lapso de apenas 10 horas en Nueva York: uno en una calle en El Bronx y dos primos en un hogar en Queens. El mes pasado Sanjay Samuel, niño de 13 años, murió en el hospital donde estaba en coma, dos días después de haber sido baleado en la cabeza camino a la escuela en Queens (NYC). A fines de agosto una mujer de 69 años que caminaba con una andadera fue alcanzada mortalmente en la cara por una bala perdida a una cuadra de su casa durante un tiroteo a plena luz del día en East Harlem.

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